Premio de la World History Assodatíon al mejor libro del año 2 Mike Davis examina una serie de sequías inducidas por el fenómeno El Niño y las hambrunas que éstas provocaron por todo el globo terráqueo en el último tercio del siglo diecinueve. Davis revela que hubo una relación íntima y funesta entre la arrogancia imperial y los fenómenos naturales que causó varias de las peores tragedias en la historia de la humanidad y plantó las semillas del subdesarrollo en lo que después se ha llamado el Tercer Mundo.
«Davis nos ha dado un libro muy relevante para el periodo contemporáneo y de gran interés histórico». Amartya Sen
Imagina un mundo en el que una vasta red de incels y otros misóginos son capaces de operar prácticamente sin ser detectados. Estos extremistas cometen actos terroristas deliberados contra las mujeres. Los adolescentes vulnerables son entrenados y radicalizados. No tienes que imaginar ese mundo, ya vives en él. Quizá no lo sepas porque no nos gusta hablar de ello, pero ya es hora de que empecemos. En este libro urgente e innovador, Laura Bates, autora de varios best sellers y fundadora del Proyecto Sexismo Cotidiano, se adentra en la clandestinidad para sacar a la luz vastas redes y comunidades misóginas. Una inmersión profunda en el extremismo mundial. Sus entrevistas con miembros de estos grupos y con las personas que luchan contra ellos ofrecen una visión única del funcionamiento de este movimiento. Las ideas se difunden desde los rincones más oscuros de Internet —a través de trolls, medios de comunicación y celebridades— hasta las escuelas, los lugares de trabajo y los pasillos del poder, pasando a formar parte de nuestra conciencia colectiva. Sin censura, y a veces tan chocante como aterradora, esta es la incómoda verdad sobre el mundo en que vivimos. Y sobre lo que debemos hacer para cambiarlo.
El asesino en serie más brutal de la historia de Argentina se hacía la ilusión de que realizarían una película basada en su vida, dirigida por Quentin Tarantino y protagonizada por Leonardo DiCaprio. Su caso, como tantos otros tratados en Los impostores, muestra una descomunal necesidad de reconocimiento. Estas extrañas y aberrantes formas de hacerse visible ante los demás surgen en un momento en que las palabras parecen insuficientes para proporcionar la conciencia de tener un lugar en el mundo. La principal carencia de estas vidas tiene que ver con una merma en su facultad de hablantes. Su propio lenguaje se muestra limitado a la hora de dar un sentido a sus vidas.