Brilla la pluma de Ramón Campusano con inusitado fulgor, señalando el colorido y los matices precisos de una aldea develada, paso a paso, con la trayectoria del personaje principal hasta conformar un universo: Furia de Perros.
Víctor Castillo Cedano se propone realizar su vida, para ello debe abandonar la aldea; entrar en el ejército constituye una opción favorable.
La otra cara de la moneda transforma la realidad contra sus principios y valores. Él debe decidir si ejecuta lo que se le ordena o se perjudica siendo fiel a los lineamientos de la conciencia social conformada por la familia y la aldea. ¿Debe el subalterno cumplir de manera irrestricta las órdenes?
He aquí una gran obra de amor, del alma apasionada del autor por los mejores valores de la humanidad. Santo Canela Escritor
Agotado
