La guerra es intrínseca a la condición humana. Siempre emprendida como método de conquista, disuasión o preponderancia hegemónica, sus relatos y experiencias han traspasado cualquier frontera temporal.
De todas las disciplinas que la han estudiado, la literatura —desde Sun Tzu a Clausewitz, de Vegecio a Maquiavelo— ha sido la que ha legado las más excepcionales obras que reflexionan sobre los conflictos, sus dimensiones y las consecuencias que aún hoy podemos percibir.