Este libro concluye 33 años de estudio de las migraciones proletarias en la República Dominicana y su conexión con el mundo azucarero. Para esta investigación tomé como modelo el texto de Harry Hoetink El pueblo dominicano: 1850-1900. Apuntes para su sociología histórica publicado en el 1971. Siguiendo sus pasos quise trazar una historia social de estos trabajadores que vinieron a la República Dominicana a finales del siglo XIX (los haitianos lo hicieron a principios del XX) en búsqueda de oportunidades para mejorar sus vidas, como ocurre siempre con todos los migrantes. Esta fuerza de trabajo fue atraída por las ofertas de colocación en la naciente industria azucarera, oportunidad que aumentaba cada vez más porque después de la crisis que provocó la baja del precio internacional del azúcar en el 1884 (que se reflejó en el país en una drástica baja en el salario en ese sector), los dominicanos se negaron a trabajar en la plantación azucarera.