VENDIDA. SINERGIA I

«Ya estoy condenada. Lo estuve desde el día en que salí del vientre de mi madre como mujer y le arranqué lágrimas en lugar de una sonrisa». La principal atracción del reino de Áragog era su mercado de mujeres, y Aquía, preparada desde su nacimiento para el momento en que sería ofertada, había aceptado su propósito: ser una vendida. Sin embargo, nadie hubiera podido advertirle del quiebre que sucedería cuando conociera al hombre que pagaría por ella. «Mi cuerpo lo compró el príncipe maldito, pero mi voluntad no le pertenecía a nadie». Embarcada en una travesía asediada por escorpiones, por asesinos y por mujeres hastiadas de su realidad, Aquía tuvo que descubrir de qué estaban hechas sus alas para poder sobrevivir al declive de Áragog.
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«Ya estoy condenada. Lo estuve desde el día en que salí del vientre de mi madre como mujer y le arranqué lágrimas en lugar de una sonrisa».

La principal atracción del reino de Áragog era su mercado de mujeres, y Aquía, preparada desde su nacimiento para el momento en que sería ofertada, había aceptado su propósito: ser una vendida. Sin embargo, nadie hubiera podido advertirle del quiebre que sucedería cuando conociera al hombre que pagaría por ella.

«Mi cuerpo lo compró el príncipe maldito, pero mi voluntad no le pertenecía a nadie».

Embarcada en una travesía asediada por escorpiones, por asesinos y por mujeres hastiadas de su realidad, Aquía tuvo que descubrir de qué estaban hechas sus alas para poder sobrevivir al declive de Áragog.

Especificaciones de productos
Autor VELAZQUEZ, AXAEL
Editora NOVA CASA
Encuadernado TAPA BLANDA
Páginas 644
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Imagen de ODISEA (TD)
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ODISEA (TD)

LaOdiseaha sido desde siempre una mina inagotable de motivos e imágenes para escritores y artistas, la presente versión en prosa de la obra, a cargo de Carlos García Gual, ofrece al lector una aproximación a la obra en una prosa de tersura y elegancia extraordinarias. LaOdisearelata el accidentado y largo viaje de regreso de Odiseo (o Ulises), uno de los héroes aqueos de la guerra de Troya, hasta su patria, Ítaca. Episodios como el del encuentro con los Cíclopes y Polifemo, con las Sirenas, con la maga Circe o la ninfa Calipso, el descenso del héroe al inframundo o el paso entre Escila y Caribdis, así como la venganza que Odiseo lleva a cabo sobre los pretendientes de su mujer, Penélope, son sólo algunas de las semillas que han fecundado sin cesar, desde su confección, la imaginación de los hombres. Atribuidas convencionalmente a Homero, laOdisea y laIlíada son una de las piedras angulares de la cultura occidental. LaOdisea ha sido desde siempre una mina inagotable de motivos e imágenes para escritores y artistas, la presente versión en prosa de la obra, a cargo de Carlos García Gual, ofrece al lector una aproximación a la obra en una prosa de tersura y elegancia extraordinarias. LaOdisearelata el accidentado y largo viaje de regreso de Odiseo (o Ulises), uno de los héroes aqueos de la guerra de Troya, hasta su patria, Ítaca. Episodios como el del encuentro con los Cíclopes y Polifemo, con las Sirenas, con la maga Circe o la ninfa Calipso, el descenso del héroe al inframundo o el paso entre Escila y Caribdis, así como la venganza que Odiseo lleva a cabo sobre los pretendientes de su mujer, Penélope, son sólo algunas de las semillas que han fecundado sin cesar, desde su confección, la imaginación de los hombres. Atribuidas convencionalmente a Homero, laOdisea y laIlíada son una de las piedras angulares de la cultura occidental. LaOdisea ha sido desde siempre una mina inagotable de motivos e imágenes para escritores y artistas, la presente versión en prosa de la obra, a cargo de Carlos García Gual, ofrece al lector una aproximación a la obra en una prosa de tersura y elegancia extraordinarias.
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AMANECER (4) (BOL)

"No tengas miedo", le susurré. "Somos como una sola persona". De pronto me ebrumó la realidad de mis palabras. Ese momento era tan perfecto, tan auténtico. No dejaba lugar a dudas. Me rodeó con los brazos, me estrechó contra él y hasta la última de mis terminaciones nerviosas cobró vida propia. "Para siempre", concluyó.
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