Todo en el reino de Arrow es mentira. Leith de Grey pensó que ir a esa nueva tierra y ofrecerse como voluntario para luchar en la arena de gladiadores (torneos crueles y sanguinarios donde solo sobreviven los más fuertes) le haría ganar suficiente oro como para salvar a su hermana moribunda. Pensó que no tenía nada que perder. Se equivocó y se lo arrebataron todo. Su esperanza. Su libertad. Su propia humanidad. Lo único que le queda a Leith es su cuerpo lleno de cicatrices de batalla, alimentado por la ira y endurecido por años de lucha para ganarse el derecho a vivir un día más. Entonces Leith conoce a Maeve, una elfa de sangre real que es todo lo que él desprecia. Todo lo que debería odiar. Sin embargo, la seductora princesa le ofrece lo que más ansía: la oportunidad de ganar el codiciado título de Guardasangre y su libertad. Pero en un reino forjado a base de secretos y mentiras, la esperanza hay que ganársela. Y Leith va a poner todo su empeño en obtener su venganza final...
Mick fue el cantante de Los Basuras, un grupo flipante del que mi padre era superfán. Y ahora compone canciones famosísimas. Y va en moto. Y también toca el bajo y es muy guay. Es genial tener un abuelo postizo tan molón, pero mi otro abuelo, Alfonso, no opina lo mismo. Creo que incluso se ha inventado un instrumento para impresionarme. ¿Qué es una bandurria? ¿Y dice que tocaba en la tuna? ¿Qué es eso? Parece que se avecina una... ¡guerra de abuelos!