A Paedyn y a Kai vuelve a separarles una realidad que se impone a sus deseos, y deberán enfrentarse a una terrible decisión en esta emocionante conclusión de la exitosa trilogía romántica, perfecta para fans de Sarah J. Maas.
Todo en el reino de Arrow es mentira. Leith de Grey pensó que ir a esa nueva tierra y ofrecerse como voluntario para luchar en la arena de gladiadores (torneos crueles y sanguinarios donde solo sobreviven los más fuertes) le haría ganar suficiente oro como para salvar a su hermana moribunda. Pensó que no tenía nada que perder. Se equivocó y se lo arrebataron todo. Su esperanza. Su libertad. Su propia humanidad. Lo único que le queda a Leith es su cuerpo lleno de cicatrices de batalla, alimentado por la ira y endurecido por años de lucha para ganarse el derecho a vivir un día más. Entonces Leith conoce a Maeve, una elfa de sangre real que es todo lo que él desprecia. Todo lo que debería odiar. Sin embargo, la seductora princesa le ofrece lo que más ansía: la oportunidad de ganar el codiciado título de Guardasangre y su libertad. Pero en un reino forjado a base de secretos y mentiras, la esperanza hay que ganársela. Y Leith va a poner todo su empeño en obtener su venganza final...
Y, desde luego, jamás esperaron que cayeran».
Como asesina rebelde, el objetivo de Raeve es cumplir su misión y que jamás la atrapen. Sin embargo, cuando un cazarrecompensas rival hace añicos su realidad, la joven se ve prisionera del Gremio de Nobles, una organización de elementales poderosos que pretenden dar ejemplo con ella. Solo la muerte podrá liberarla.
Devastado por una terrible pérdida, el jinete de dragón Kaan Vaegor decapitó a un rey y se puso su corona derretida. Ahora, su búsqueda incansable para reunir fragmentos lunares lo conduce a la prisión de la ciudad, donde se topa con una Raeve encadenada, con rabia en la mirada y sangre en las manos. Juntos, deberán descubrir una verdad que amenaza con hacer que su mundo se desmorone... y ellos con él.