No sé absolutamente nada de él, a pesar de que es el jefe de mi novio.
A pesar de que mi mejor amiga está ligeramente obsesionada con él y con su música.
A pesar de que es el vocalista de una de las bandas más importantes del momento.
No sé nada de él... Así que lo más coherente que podría haber hecho cuando me pidió fingir ser su novia por una noche hubiera sido negarme.
De ese modo no habría aparecido en la televisión una foto mía entre sus brazos, no estaría rogándole a mi novio real que me escuche, no tendría a su representante presionándome con firmar un contrato para fingir ser su novia por más tiempo.
Londres, 1923. Los dragones surcan los cielos y las protestas estallan en las calles, pero Vivien Featherswallow no está preocupada. Ella se ha propuesto seguir acatando las reglas, conseguir una beca de prácticas para estudiar los idiomas de los dragones durante el verano y asegurarse de que su hermana pequeña no crezca como miembro de la tercera clase. A medianoche, Viv ha desatado una guerra civil.
Acorralada por las consecuencias de sus actos, cuando recibe una misteriosa oferta de «trabajo», no duda en aceptarla. Pero, cuando llega a Bletchley Park, Vivien descubre que ha sido reclutada para descifrar los secretos de una desconocida lengua de dragones, lo que permitirá al gobierno ganar la guerra. Si tiene éxito, su familia y ella serán libres. Si fracasa, todos morirán.
El demonio me ha atrapado.
Lo que empezó como un error inocente se ha convertido en todo un infierno.
En mi defensa diré que no pretendía involucrarme con un príncipe de la mafia.
Pero él se ha abierto paso entre mis muros igualmente.
Jeremy Volkov puede parecer encantador, pero en su interior acecha un auténtico depredador.
Solo quiere poseerme, ser mi dueño.
Pero yo no tengo ninguna intención de quedarme en su mundo sangriento.
O eso creo.
Tras descubrir que ha sido profetizada para salvar el reino, el deber de Aya debería estar claro: volver a su patria con Will, su antiguo enemigo, para servir a su reina en la guerra que se avecina.
Sin embargo, con la traición acechando, Aya y Will se ven obligados a mentir, manipular y ocultar sus sentimientos mientras luchan por descubrir la verdad antes de que la oscuridad los destruya a todos.
Y con los secretos y engaños que persiguen a Aya allá donde va, la joven no puede sino preguntarse si es la intención de los dioses que salve el reino... o si su destino no será, por el contrario, verlo arder.
UNA BRUJA...
Rune Winters está huyendo. Desde que el chico al que amaba, Gideon Sharpe, reveló quién era y la entregó al enemigo, el mundo entero la quiere ver muerta. Si Rune quiere sobrevivir, debe aliarse con la cruel y peligrosa Cressida Roseblood, que planea recuperar la República y reinstaurar un Reino de Brujas. Y para ello necesita a Rune.
UN CAZADOR DE BRUJAS...
Al parecer, a Rune no le bastó con engañar a Gideon; ahora lo ha traicionado aliándose con la bruja que convirtió su vida en un infierno. Gideon no permitirá que la República caiga en manos de las brujas y se sumerja de nuevo en las pesadillas del pasado. Todas las brujas deben morir, especialmente Rune Winters.
El Rey Fae es el monstruo más cruel de todo Thorngate. Se dice que es despiadado y sin corazón. Y, aparentemente, estamos prometidos…
Cuando viene para negociar nuestro matrimonio, hago todo lo que está en mi poder por retrasar la boda, pero, cuanto más tiempo paso con el misterioso rey, más me cuestiono si los rumores sobre él son verdaderos.
Sé que el Rey Fae tiene un pasado oscuro que explica por qué es como es, y por más que quiero odiarlo por ello, voy a descubrir todos sus secretos… aunque ponga en peligro mi corazón.