Ha llegado el día del paseo semanal de Jim Pancé, por fin podrá disfrutar del silencio y escuchar tranquilamente los sonidos de la jungla. Hasta que su mejor amigo Norman decide acompañarlo y con él, ¡casi todos los animales de la selva!
Menos mal que Jim tiene su naranja antiestrés porque parece que este paseo no será muy relajante ¡aunque sí muy alocado y divertido!
Serpientes de cascabel, tarántulas, escorpiones... ¡En Arizona, las sorpresas venenosas no acaban nunca! Y yo debo ir precisamente allí a buscar a Halcón Rojo, un gran amigo del abuelo Torcuato, para llevarle un regalito de su parte... ¡Ah, qué trepidante, y peligrosa, aventura!
La niebla cubría Ratonia y mil violines de plata sonaban en la noche... Alguien había abierto un hueco entre el Mundo de la Realidad y el Reino de la Fantasía. ¡Una nueva misión me aguardaba!
Acompaña a Geronimo Stilton en una serie de divertidas y conmovedoras situaciones donde los más pequeños aprenderán a reconocer y gestionar sus emociones. A través de historias llenas de humor y ternura, los niños descubrirán cómo afrontar sentimientos como la tristeza, la alegría y el miedo de manera saludable. Cada emoción se presenta de forma clara y accesible, ayudando a los lectores a entender mejor lo que sienten.
¿Queréis saber qué hace Geronimo Stilton en un rincón perdido del Océano Rático Meridional, entre fósiles de dinosaurios y rocas viejísimas? Pues, es sencillo... ¡Forma parte de una misión secreta!
En esta ocasión, tendrá que hacer frente a una tarea un tanto apestosa y le tocará recoger... ¡caca de triceratops! Preparaos, porque ¡la Isla de los Dinosaurios os espera con muchos secretos increíbles y mil aventuras trepidantes!
Estamos de vuelta: ¡la isla de los dinosaurios nos necesita! Esta vez nos espera una superratónica caza del tesoro, la búsqueda del legendario cofre de Barbagrís Geiger. Entre peligros jurásicos y descensos por ríos prehistóricos, llegaremos al Claro Plácido, el hábitat de los majestuosos titanosaurios. ¿Será posible que el tesoro esté escondido precisamente allí? Para descubrirlo, tendremos que vérnoslas con un imprevisto que nos hará vibrar de canguelo los bigotes...