Casi las mismas decadas de insumisión y rebeldía que ha protagonizado Godard con su vida y obra lleva Paulino Viota estudiando ambas, desde el apasionamiento cinefilo y la devoción inteligente que siente por "el cineasta con mayor riqueza estructural de la historial del cine". Dividido en dos grandes bloques, este ensayo magistral y ya definitivo tras la reciente desaparición del cineasta pone en perspectiva todas las etapas de su mítica carrera, que arranca con la irreverente modernidad de los años 60, atraviesa la militancia política y el utópico deseo de fusión en lo colectivo, y desemboca, rayando el nuevo milenio y como colofón a una duradera y profunda reflexión sobre la mediación tecnológica, en ese estilo inimitable donde lo poetico acontece como posibilidad de una simultaneidad inedita entre imágenes y sonidos, materiales ya convertidos en "formas que piensan" la historia del cine y la del siglo XX, como ejemplifica a la perfección una de sus cimas, "Histoire(s) du cinema".
George Lucas es uno de los cineastas más reconocidos y admirados de todos los tiempos. En este libro, David M. Buisán nos descubre la fascinante historia de su vida y obra. A través de sus vibrantes ilustraciones, podremos revivir escenas icónicas de las películas de Lucas, además de conocer detalles y curiosidades sobre la producción y realización de sus grandes trabajos y de otras obras menos conocidas.
Frank Frazetta has reigned as the undisputed king of fantasy art for 50 years, his fame only growing in the years since his death. With his paintings now breaking auction records (Egyptian Queen sold for $ 5.4 million in 2019) he’s long overdue for this ultimate monograph.Born to a Sicilian immigrant family in Brooklyn, 1928, Frazetta was a minor league athlete, petty criminal and serial seducer with movie star looks and phenomenal talent. He claimed to only make art when there was nothing better to do – he preferred playing baseball - yet began his professional career in comics at age 16. Strip work led him to the infamous EC Comics, then to oils for Tarzan and Conan pulp covers. Both characters were interpreted by many before him, but as he explained in the 1970s, “I’m very physical minded. In Brooklyn, I knew Conan, I knew guys just like him,” and he used this first-hand knowledge of muscle and macho to redefine fantasy heroes as more massive, more menacing, more testosterone-fueled than anything seen before. As counterbalance he created a new breed of women, nude as censorship allowed, with pixie faces and multiparous bodies: thick thighed, heavy buttocked, breasts cantilevered out to there, yet still, with their soft bellies and hints of cellulite, believably real. Add in the action, the creatures, the twilit worlds of haunting shadow and Frazetta’s art is addictive as potato chips.