Adramón y los libros de caballerías: historia y ficción se aproxima al estudio de uno de los géneros literarios más exitosos de la España del siglo XVI a partir de un ejemplar del corpus casi desconocido.
El punto de partida y de llegada del análisis es el Adramón, pero, más precisamente, el sentido conflictivo de su naturaleza prosística: un libro de ficción que se construye sobre elementos de la realidad histórica observable; una historia fingida que se asemeja a las verdaderas. De la disección de su tejido narrativo, se evidencia cómo la ficción precervantina exploraba ya los límites de la representación literaria o poética de la realidad con un objetivo subyacente: la búsqueda de la verosimilitud.
En ese sentido, el libro considera la existencia de Adramón como una nueva propuesta de ficción que tiende hacia lo realista, cuya consagración no se logrará, no obstante, hasta que las aventuras de don Quijote salgan de las prensas madrileñas de Juan de la Cuesta en 1605.
La tarde del 21 de agosto de 2021, un mensaje en twitter le ponía cara y nombre a una de las miles de familias afectadas por la ocupación de los talibanes de la ciudad de Kabul. El mensaje publicado por la periodista Reyes Calvillo en su perfil de la red social (SoyLaCalvillo), alerto enseguida a muchos compañeros de profesión para difundir la historia de un joven traductor que había huido de Afganistán en 2013 y se encontraba establecido en Sevilla, a cuya familia amenazaron de muerte los talibanes si el no regresaba a Kabul para ser ajusticiado.
Este libro recoge, en forma de diario, la historia real de muchas de las gestiones que se hicieron durante casi dos meses para salvar a la familia del traductor y llevarla a España; y, en forma de novela los acontecimientos que rodearon a ellos, como a muchos afganos, en las primeras semanas de la vuelta de la dictadura talibán a su país.
Pariroflexia no es un simple libro sobre libros: es un juego literario de palabras con relieve de papel. Guillermo Busutil nos propone una aventura poética para todo amante de la letra impresa y la imaginación. Como apunta Nuria Barrios en su prólogo, es un libro pequeño pero infinito; es una plantación secreta: en sus páginas hay un huerto y un parque y un jardín y un bosque y una selva. Contiene frases frondosas. Otras parecen ramas. Las hay que recuerdan hojas. Algunas aún son yemas, hay que esperar para verlas crecer. Las cosas que merecen la pena siempre requieren tiempo: el placer, el amor, la vida.
Este no es un libro cualquiera: es una “conversación” con un apasionado editor de los albores de la imprenta. Su apariencia de glosario y su intención pedagógica lo alejan de una lectura convencional y lo convierten en una auténtica aventura. Adentrarse en las escuetas y precisas palabras de Gaetano Volpi resulta balsámico, apaciguador, genuino. Volver a las fuentes primeras, a las sabias reflexiones de quienes nos precedieron en el oficio editorial, de quienes hacían las cosas con la debida calma, ‘festina lente’, que pensaban y aprendían de su experiencia y de sus errores al ritmo que imponen el saber hacer y el trabajo bien hecho… Obras como esta son un homenaje al trabajo y la entrega ded tantísimos que han hecho posible el desarrollo imparable de los libros hasta nuestros días. Estamos, pues, en deuda con ellos, y les debemos una reposada y atenta lectura que compensarán con buen humor y buenos consejos pese a los muchos años que nos separan.
«En nuestro propio presente, en el que el mito y la mentira regresaron al centro de la política, las críticas antifascistas de Borges y Freud vuelven a tomar fuerza».
Para el fascismo el mito podía ser más real que la realidad. Las nociones fascistas de líder, nación, poder y violencia, impregnadas de imaginería mítica, tenían inscripta la fantasía de trascender la historia: un pasado primordial mitificado inspiraría el derrocamiento heroico de un presente degradado para lograr un futuro violentamente redimido. Asumiendo que comprender acabadamente lo distintivo de la mitología del fascismo es condición de posibilidad para la explicación de su peligro en el pasado y en el presente, Federico Finchelstein acude a una sorprendente combinación de pensadores para dar cuenta del fascismo como una maquinaria de creación de mitos políticos. Así, muestra cómo la obra literaria y crítica de Borges y la escritura psicoanalítica de Freud sirven para entender las dimensiones míticas e inconscientes de la política fascista, lo mismo que el análisis de variedad de intelectuales latinoamericanos y europeos, con especial énfasis en la teología política de Carl Schmitt. En un momento regresivo en que los asuntos mundiales tienden a ensombrecerse cada vez más, el análisis crítico de los peligros del mito en la política contemporánea que aquí se presenta puede leerse como herramienta para la resistencia.
Este libro se adentra en los entresijos del cuento de tradición oral La Barbe Bleue, fijado por Charles Perrault en 1697. La intención que rige la interpretación del profesor Puelles ha sido la de tomarlo como umbral de un modo del horror moderno irreductible al género «goticista» que a partir del siglo XVIII ostentará la hegemonía del miedo literario. Publicado en el gozne entre el clasicismo y el rococó, y llevándonos al paroxismo del terror visual, Barbazul abre el camino a una narrativa traumática, testimonial, de pura supervivencia, cuyos extremos alcanzan a Primo Levi, entre otros muchos.
El macabro cuento que nos ocupa es también la ocasión para situarnos en un enclave en el que la experiencia del lector u oyente transita –quizá por primera vez– hacia territorios como lo sublime y lo siniestro en la ambivalencia entre el placer estético de la representación del horror y el conocimiento –más «antropológico» que estético– de la pura crueldad humana. Barbazul es, además, un espléndido contrapunto a la doctrina del cogito cartesiano, dándosele prevalencia al terror propio (y no lo hay más atroz que el de «verse morir») sobre aquellas otras condiciones en las que sí será posible ganar la distancia reflexiva. «Tengo miedo, luego existo», escribió Roland Barthes.