Cuando Collón Burpo sobrevivió una apendicetomía de emergencia, su familia estaba rebosante de alegría por el milagro. Sin embargo, lo que les sorprendió fue la historia que emergió en los meses siguientes: una historia tan hermosa como extraordinaria, que detallaba el viaje de ida y vuelta al cielo de su hijo. Collón, que aún no tenia cuatro años, les contó a sus padres que había dejado su cuerpo durante la operación —y aulenlicó esa afirmación describiendo con exactitud lo que estaban haciendo sus padres en otro lugar del hospital mientras a él lo operaban. Habló de visilar el cielo y narró historias que le conlaron personas que encontró allí que nunca había conocido en vida, y reíalo eventos que habían ocurrido anles de que él naciera. También sorprendió a sus padres con descripciones y detalles poco claros sobre el cielo que correspondían exactamente con la Biblia, a pesar de que todavía no había aprendido a leer. Con encantadora inocencia y la audacia franca de un niño, Collón habla de encuentros con familiares ya ausentes por mucho tiempo. Describe a Jesús, los ángeles, y lo «muy, muy grande» que es Dios, y lo mucho que Dios nos ama. Narrado por su padre, pero usando las excepcionalmenle sencillas palabras de Collón, El cielo es real ofrece un vislazo al mundo que nos espera, donde Collón dice que: «Nadie es viejo ni nadie usa anteojos». El cielo es real cambiará para siempre la manera en que piensas sobre la eternidad, ofreciéndote la oportunidad de ver, y creer, como un niño.
Temes que no saldrás. Tienes miedo que la depresión nunca te deje, que los lamentos no se detengan, que el dolor nunca se vaya. ¿Alguna vez se despejará este cielo gris? ¿Se aliviará esta carga?
¡Sí! La liberación en la Biblia es audaz y llamativa, y está en todas partes. Piensa en la historia de José en el Antiguo Testamento: arrojado a un foso por sus hermanos, vendido como esclavo e injustamente encarcelado. Pero Dios tejió en algo bueno lo que estaba destinado a ser malo.
Dios está en el negocio de redimir lo quebrantado. Él lo hacía entonces. Y lo sigue haciendo ahora. ¿Anhelas algo de esperanza para estos tiempos difíciles? Entonces este es el mensaje que necesitas. Saldrás de esta. No será sin dolor. No será de un día para otro. Pero Dios usará esta pena para bien. Mientras tanto, mantén la calma. No seas insensato, ni ingenuo. Pero tampoco desesperes. Con la ayuda de Dios, saldrás de esta.
¿Le conocen por las maletas que se echa a cuestas?
Es probable que lo hiciera esta mañana. En algún punto entre su primer paso y el último para cruzar el umbral, usted tomó equipaje. Fue hasta el dispensador de maletas y cargó unos cuantos bolsos. Pero este dispensador no es la cinta transportadora del aeropuerto. Es la de la mente. Y las valijas que tomamos no son de cuero, sino de cargas: Las maletas de la culpa, del descontento, de la ansiedad y de las tristezas. Añádase un maletín de perfeccionismo, el saco de la soledad y la bolsa de lona del temor. No es raro que estemos tan cansados al final del día. ¿Hacia dónde podemos volvernos en busca de ayuda? ¿Qué le parece si consultamos aun viejo amigo, el Salmo Veintitrés?
Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Aunque ande en valle de sombra de muerte.
No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Aderezas mesa delante de míen presencia de mis
angustiadores;
Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
Y en la casa de Jehová moraré por largos días.
Con estos versos como guía, Max Lucado nos conduce a lo largo de un útil inventario de nuestras cargas. Nuestro deseo es que Dios use este salmo para recordarle que deje las cargas que nunca debió llevar. Max, Denalyn y sus tres hijas viven en San Antonio, Texas, donde pastorea
la iglesia Oak Hills.
República Dominicana. La Tierra de Dios, promete ser un libro impactante, revelador y sin precedentes en la historia dominicana, presentando la visión del creador de los cielos y la tierra, en los proyectos patrióticos de los precursores de nuestra Nación, demostrando con evidencias históricas, cómo la mano del Altísimo estuvo actuando desde el descubrimiento de nuestra hermosa isla y en cada uno de los pasos dados por Duarte y los Trinitarios para fundar lo que hoy conocemos como República Dominicana.
EPIPANIO HERNÁNDEZ. PINTOR/ESCULTOR. Director Casa de la Cultura Haina, San Cristóbal.
Cuando el caos de nuestras vidas cotidianas se vuelve abrumador, ¿dónde podemos acudir en busca de paz y descanso? El autor de best sellers, Max Lucado, señala a la Fuente de toda esperanza y fortaleza en 40 Oraciones sencillas que traen paz y descanso, que contiene cuarenta oraciones guiadas y escrituras complementarias para cualquier situación. Esta guía que acompaña a Antes del amén sirve como una herramienta de alcance para ministerios e iglesias, ofreciendo sencillo para quienes les es difícil orar.