A finales del siglo XVIII, con el estallido de las revoluciones liberales, las declaraciones de derechos se convirtieron en protagonistas irremediables del ámbito político, social, filosófico y jurídico. Algunos de estos grandes textos, como la Declaración de Derechos del buen Pueblo de Virginia, la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano o las Diez Primeras Enmiendas de la Constitución de los Estados Unidos de América, consolidaron una idea esencial que se ha transmitido a lo largo de las siguientes generaciones: los derechos y libertades son inherentes a las personas por el mero hecho de serlo. Lo que viene a significar que nuestras acciones no determinan si somos merecedores o no de los derechos que, entre otras cosas, ayudan a conformar nuestra dignidad. En el año 2015 se introdujo en España la pena de prisión permanente revisable, ocasionando una fuerte polémica en la doctrina constitucional y penal, que no ha dejado de analizar las fricciones del encaje constitucional de esta pena con los derechos, libertades y principios fundamentales, la dignidad humana y el propio concepto de Estado social y democrático de Derecho. Todo ello ha deparado una larga discusión jurídica, que comenzó con la presentación de diversos anteproyectos de ley orgánica que incluían esta pena de privación de libertad y que ha continuado hasta la Sentencia del Tribunal Constitucional 169/2021, que ha establecido la constitucionalidad de la prisión permanente revisable. Esta monografía examina y escruta los elementos que acompañan a esta pena, poniendo el foco en la importancia de la investigación interdisciplinar desde las metodologías y elementos propios del Derecho Penal y del Derecho Constitucional, basándose en el respeto a los derechos y libertades.
«Los libros que merecen ser leídos son aquellos que enriquecen nuestra cultura y satisfacen la curiosidad intelectual. El libro de Daniel García-Pita cumple ambas funciones con grandeza y una claridad admirables. Incluso para quien no esté familiarizado con el mundo jurídico, resultará interesante y placentero seguir el pensamiento del autor, que además aporta su agudo sentido del humor y, en ocasiones, una fina ironía. Es, en todo caso, un libro que resultará especialmente útil para los abogados en ejercicio. Se trata de una excelente historia del desarrollo de la abogacía, salpicada de anécdotas sorprendentes y casos concretos que evocan momentos históricos de gran relevancia. Prepárese, pues, el lector doy fe de ello a satisfacer su curiosidad intelectual, a enriquecer su cultura y, por si fuera poco, a disfrutar de una lectura amena y divertida. Yo se lo garantizo.
Un libro polémico que ha de irritar a muchos porque la sinceridad no gusta a quienes están acostumbrados al discurso «políticamente correcto», es decir, a la realidad maquillada, a la verdad silenciada y al elogio ritual. Un libro dirigido a los que padecen por la Injusticia disfrazada de Justicia y a quienes buscan lo que hay detrás de las leyes hipócritas, de las palabras altisonantes y de las ideologías hueras. Alejandro Nieto, después de haber analizado implacablemente en otro ensayo lo que es la realidad de la Justicia y la Ley, se concentra ahora en el Poder Judicial demostrando que no es un Poder constitucional, desde el momento en que está subordinado al Poder político, que sus miembros, diga lo que diga la Constitución, no son independientes ni responsables y, por otro lado, que la organización judicial en su conjunto no es sino un mero servicio público, el de la Administración de Justicia, que más que administración es desgobierno. La prensa informa diariamente de los desastres de esta Administración –de sus retrasos, de sus costes, de sus disparates- y de su sumisión al gobierno a través de un Consejo General del Poder Judicial descaradamente manipulado por los partidos políticos. Todos estos hechos son bien conocidos y lo que faltaba era relacionarlos en un síndrome global que aquí se llama el desgobierno judicial.
Diplomacia Contemporánea: Teoría y Práctica para el Ejercicio Profesional es una obra muy bien estructurada, con un esquema ágil que el autor, Embajador Manuel Morales Lama, ha adoptado para facilitar el entendimiento de cada uno de los asuntos a que se ha referido en este libro. Es un estudio académico con la debida precisión de los conceptos y muy bien documentada, donde se pueden encontrar muchas respuestas a las inquietudes o simples consultas, que surgen sobre el tema, tanto en el medio académico, como en el ejercicio de la diplomacia. Indudablemente que la calidad del trabajo garantiza su particular importancia y utilidad. Una excelente obra referida a la Diplomacia Actual.
Esta obra se encuentra enmarcada en el contexto de dos áreas del conocimiento: el derecho y las tecnologías de la información y las comunicaciones; el autor ofrece un detallado análisis comparativo de las normas jurídicas penales de la Unión Europea, Argentina, Perú, Chile y Colombia en relación con los delitos informáticos como un instrumento institucional de la lucha contra la ciberdelincuencia. Delitos informáticos comprende una fundamentación jurídico penal detallada, explorando la tipicidad, analizando los elementos que componen un tipo penal y profundizando en los aspectos cruciales de la antijuridicidad y la culpabilidad. Presenta, además, un análisis comparativo en el marco jurídico internacional de los delitos informáticos, el estudio de la situación en Colombia previa a la ley de delitos informáticos y cada uno de los delitos informáticos en Colombia.
En los últimos treinta años hay países en los que la criminalidad ha caído de manera sensible, lo que priva de fundamento a las demandas ultrapunitivistas de un significativo sector de la población y de la política. Frente a estas, Luigi Ferrajoli recuerda que el único modo acreditado de prevenir la delincuencia común convencional lo constituyen las políticas sociales. Y también que la sola respuesta legítima a la desviación criminal es la representada por un proceso con todas las garantías.
De aquí la necesidad de elaborar una sólida teoría del garantismo penal, cuya más consistente expresión es este libro. Como escribe el autor, «corresponde a la política hacer real este garantismo. Diseñar sus líneas maestras teóricas es el contenido primario de la cultura jurídica».