«El ser humano es ahora víctima de su propia tecnología», afirmó Aldous Huxley en una entrevista a la BBC en 1961, dos años antes de morir. Célebre por su novela distópica Un mundo feliz, Huxley fue también un lúcido crítico de la civilización industrial. Desde el comienzo de su carrera de escritor, se mostró preocupado por la relación entre el progreso científico y la sociedad humana.
Los ensayos reunidos en El precio del progreso, escritos entre 1946 y 1962, muestran cómo Huxley puso por delante de cualquier otro factor para el cambio, la necesidad de cuestionar el dogma del progreso científico y tecnológico. Supo desvelar el peligro inherente a la transformación social en Occidente si dicha transformación, independientemente de su naturaleza política, no tenía en cuenta en qué medida la industrialización y la tecnología suponían amenazas patentes para la emancipación total de las comunidades humanas.
A partir de la categoría de la génesis, Derrida ofrece una original lectura de la filosofía fenomenológica y pone las bases del pensamiento deconstructivo que desarrollará hasta su muerte.
Escrita entre 1953-1954, aunque publicada en 1990, El problema de la génesis en la filosofía de Husserl intenta analizar las dificultades y reordenamientos que provocó en el fundador de la fenomenología la reflexión sobre el tiempo, el devenir y la historia, tanto en la constitución del sujeto trascendental como en la producción intencional del sentido de sus objetos, especialmente los científicos.
En esta obra de juventud, Derrida presenta el verdadero programa de su filosofía y de su escritura. Al acercarse hoy a sus páginas, el lector puede también recuperar algunos de los rasgos esenciales del fecundo e influyente panorama filosófico francés de mediados del siglo XX, donde figuras como Levinas, Sartre, Merleau-Ponty o Tran Duc Thao desarrollaron su pensamiento fenomenológico más característico.
En este iluminador ensayo, Rafael Argullol traslada al lector al núcleo artístico de la Italia del siglo xv, la Toscana, en un momento crucial de la historia. Las circunstancias políticas, económicas, sociales y culturales del denominado Quattrocento sentaron las bases de uno de los episodios culturales más trascendentes de nuestra civilización: el Renacimiento. Argullol analiza de forma rigurosa y amena las características plásticas, arquitectónicas y literarias del período, así como las tensiones culturales que la irrupción del humanismo produjo en la sociedad tardomedieval. Un acercamiento tan fundamental como sugerente al lento pero imparable advenimiento del hombre moderno.
¿Qué significa ser libre? ¿Podemos siquiera demostrar que lo somos? Y si lo fuéramos, ¿por qué deberíamos subordinar nuestra libertad a una norma ética? Si el universo no manifiesta interés alguno en nosotros, ¿por qué debemos actuar moralmente?
Practiquemos o no el bien, la naturaleza seguirá su curso y continuará ciega ante los esfuerzos éticos de la humanidad. Por mucho que nos afanemos en escuchar su voz, su lenguaje resultará siempre ininteligible para nuestras aspiraciones, pues se basa en leyes matemáticas impersonales, fijadas en los inicios del universo y ajenas a cualquier preocupación por nuestra suerte y por el valor de nuestras acciones.
En este libro, Blanco intenta responder a estas inquietudes. La libertad emerge como la capacidad de crearnos a nosotros mismos, de construir, de legar algo al mañana y de ampliar los horizontes y las posibilidades de nuestra reflexión.
Referente ineludible en la historia de las ideas, Berlin recorre magistralmente, en estos nueve ensayos, las ideas que han gobernado la historia europea durante los últimos tres siglos: nacionalismo, liberalismo y especialmente marxismo. Con el fin de extraer lecciones morales, Berlin se pregunta por qué los seres humanos tienden a admirar a hombres movidos por la ambición, los celos o la vanidad monomaníaca -incluidas figuras notables de la historia como Pedro el Grande y Napoleón-, y proporciona algunas respuestas, siempre reveladoras, en este estudio de las ideas. El sentido de la realidad incluye textos clave de quien ha sido considerado uno de los mejores ensayistas en inglés, y cubre un amplio abanico de temas: el realismo en la historia, naturaleza y el impacto del marxismo, la historia del socialismo, la radical revolución cultural llevada a cabo por los románticos, las nociones rusas de compromiso artístico, o la práctica y el origen del nacionalismo...
Predrag Cicovacki nos invita a reflexionar sobre lo que da sentido a la vida. Su libro nos enseña que la teoría y la práctica, las ideas sobre la vida y los modos de vivir deberían ser inseparables. Del mismo modo en que hablar de la moralidad no debería separarse de practicar la virtud, hablar sobre el sentido de la vida no debería separarse de intentar vivirla con tanto sentido como sea posible. Examinar las vidas de las personas que más admiramos revela que vivir una vida con significado nunca puede ser una simple búsqueda de logros y éxitos individuales. El yo no es ni la realidad última, ni debería ser nuestra máxima preocupación. Nuestra búsqueda de un significado debe orientarse a algo mayor que nuestras vidas individuales, y lo que debemos discernir es qué son y qué no son verdaderos objetos de tal devoción. No podemos lograrlo solos.