Al-Ándalus y Bizancio, orillas enfrentadas de un mismo mar.
Cuando, en los albores del siglo VII, Mahoma inició la era musulmana, el equilibrio de poder en el antiguo Mare Nostrum resultó profundamente alterado. El Imperio bizantino, hasta entonces la indiscutible potencia naval y territorial del Mediterráneo, se vio forzado a convivir con el pujante poder islámico. Al-Ándalus, en occidente, y Bizancio, en oriente, son las orillas extremas de un mar atravesado por el enfrentamiento religioso, pero también por el intercambio de ideas, viajes, embajadas y experiencias comunes.
De la mano de Carlos Martínez, experto en el mundo bizantino y sus conexiones con el islam, vislumbraremos, a través de la neblina de las fuentes históricas, el fascinante panorama de los mundos andalusí y bizantino a finales de la Alta Edad Media, y descubriremos sus relaciones. Conoceremos la aventura de los andalusíes que fundaron un emirato en Alejandría para después conquistar Creta, navegaremos en embajadas con destino a Córdoba y Constantinopla, encontraremos a viajeros ávidos de saber como Ibn Habib y León el Filósofo y seremos testigos de las turbulencias sociales que sacudieron los dos poderosos Estados. Todo ello, junto con otras escenas, tejerá el sugerente tapiz de una época y lugar igualmente cautivadores y complejos.
En 1614, Tokugawa Ieyasu prohibió definitivamente el cristianismo en todo su imperio y ordenó la expulsión de los misioneros y la condena a muerte de miles de cristianos.
¿Cuáles fueron las causas de la persecución a los cristianos en Japón? ¿Llegó el cristianismo a desaparecer? ¿Por qué nunca alcanzó gran relevancia entre las religiones practicadas en Japón? Responder a estas preguntas exige volver la mirada cinco siglos atrás –cuando los primeros cristianos llegaron al archipiélago– e intentar comprender el modo de pensar y vivir de aquellos japoneses.
A finales de 1596, un galeón español procedente de Manila, con rumbo a Acapulco, encalló en las costas de Japón. Los españoles confiaban en que los japoneses les facilitarían continuar su viaje, amparados en las buenas relaciones entre el gobernador de Filipinas y el caudillo militar nipón, Totoyomi Hideyoshi. Sin embargo, Hideyoshi confiscó la carga del galeón y condenó a los misioneros, y a varios cristianos laicos japoneses, a morir crucificados. La condena se ejecutó el 5 de febrero de 1597.
Los veintiséis cristianos condenados, que pasaron a la historia como mártires de Nagasaki, no fueron los primeros ni serían los últimos. Con la llegada al poder de Tokugawa Ieyasu, sucesor de Hideyoshi, se ordenó la prohibición definitiva del cristianismo en el país y la expulsión de todos los misioneros. Los cristianos –sacerdotes, religiosos o laicos; europeos, asiáticos o japoneses–, fueron quemados o decapitados.
UN RELATO DE LO QUE FUE EL JUICIO DE NÚREMBERG, DESDE SU GÉNESIS, AL INICIO DE LA GUERRA, HASTA SUS LEJANAS REPERCUSIONES EN LA CREACIÓN DE LA JUSTICIA INTERNACIONAL.
Alemania, octubre de 1945. Los Aliados, vencedores de la Segunda Guerra Mundial, se preparan para juzgar los crímenes cometidos por el Tercer Reich.
Durante un año, bajo la atenta mirada de la prensa de todo el mundo, una veintena de altos dignatarios del régimen nazi tendrán que responder de sus actos ante los magistrados del Tribunal Militar Internacional.
A partir de las actas del juicio y los testimonios, Annette Wieviorka relata Núremberg, este gran acontecimiento del siglo XX, desde su génesis, al inicio de la guerra, hasta sus lejanas repercusiones en la creación de la justicia internacional.
«El barco en el que viaja Aniceto rumbo a Roma (…) llega por fin a Ostia, puerto de la capital. Desde allí, se dirige apresuradamente a la Ciudad Eterna. El día anterior, una misiva firmada por el emperador le instaba a presentarse lo antes posible en su morada. El tono urgente de la carta dejaba entrever una cierta gravedad que no cesa de inquietarlo. Mientras bordea las márgenes del Tíber, la cima del Palatino emerge poco a poco al sol matutino que corona la capital.»
Estamos en la Roma del año 62 d.C. y, en lo alto del Palatino, se gesta un complot. Nerón, ansioso por unirse a Popea, tiene la intención de divorciarse de la emperatriz Octavia, pero necesita un pretexto y el esclavo liberado Aniceto será el instrumento de esta conspiración. Es a él a quien seguiremos por las calles de la capital, de los templos a los palacios, de los barrios bajos a las arenas del circo, acercándonos a lo que fue vida cotidiana en Roma. ¿Cómo vivía la gente en la época de Nerón? ¿Cuáles eran las creencias, los miedos, el hábitat, los placeres, las libertades y las servidumbres de los romanos?
Hay pocos ensayos fundacionales, aquellos que suponen una antes y un después, cuyas ideas fecundas germinan y dan pie a debates fértiles y ramificaciones profundas. Los jacobinos negros es uno de ellos. Su lectura sobre la única rebelión esclava exitosa de la historia, la revolución haitiana de finales del siglo XVIII, es un parteaguas en la comprensión de la historia del colonialismo y del capitalismo. Más de dos siglos después, la poblacion descendiente todavía paga el precio de enfrentarse victoriosamente a las imperios francés, español e inglés.
¿Qué hace tan decisiva la interpretación de C. L. R. James sobre los acontecimientos desencadenados, a sangre y fuego, en esa isla del Caribe entre 1793 y 1804? El hecho de que su mirada desplazara el foco, por primera vez, de los victimarios europeos blancos a los centenares de miles de seres humanos que padecieron el secuestro, la deportación, la violación, la tortura y el asesinato a escala industrial. Un texto publicado en 1938, todavía plenamente vigente, y que cambió para siempre la historiografía de la lucha contra la esclavitud.
A mediados de marzo de 1943 y con gran secreto se formó el Escuadrón X, cuya misión era romper las represas del Ruhr para inundar las tierras de cultivo y paralizar la industria en ese importantísimo valle alemán. Si bien el heroísmo de la tripulación aérea fue totalmente auténtico, al igual que la brillantez de algunos protagonistas de la misión como Barnes Wallis el inventor de la bomba Upkeep, también lo es que los comandantes que prometieron a sus jóvenes aviadores que el éxito podría acortar la guerra fantasearon salvajemente.
Hastings describe vívidamente toda la operación, desde la perspectiva puramente militar a las devastadoras pérdidas materiales y humanas: unos 1.400 civiles murieron en las inundaciones que arrasaron el valle de Möhne, más de la mitad de ellos prisioneras francesas o trabajadoras forzadas rusas y polacas.
Solo Max Hastings podía ofrecernos un relato nuevo de esta operación legendaria. Pudo entrevistarse con algunos de sus protagonistas como el propio Barnes Wallis, y sitúa el asalto a las presas en el panorama general de la ofensiva de bombarderos y de la segunda guerra mundial, con retratos conmovedores de los jóvenes aviadores, muchos de los cuales perdieron la vida. Como todos los libros de Hastings, Operación Castigo es sobre todo una historia humana, que retrata a los jóvenes héroes del Escuadrón 617 con un detalle sin precedentes. Esta es una historia conmovedora e intemporal, de hombres muy jóvenes que lograron lo casi imposible, pero también, sin pensarlo, desató una catástrofe de proporciones impensables.
La conquista islámica de la península ibérica, Spania, culminaba la expansión hacia Poniente del pujante islam, que había comenzado menos de cien años antes y que había llevado a los seguidores del Profeta a extender su fe y sus dominios desde el Atlántico hasta el corazón de Asia. Como cualquier conquista, se hizo por la espada y acarreó hambre y cautiverio. Yeyo Balbás, investigador experto en el periodo y autor de novelas históricas como El reino imposible, Pax romana o Pan y circo, escribe, con oficio de historiador y prosa de novelista, una documentada y completa narración del final de la Spania visigoda y de la implantación musulmana.
Examinando retórica, normas políticas, literatura popular y las teorías científicas a lo largo de 400 años, Nancy Isenberg rechaza las suposiciones sobre la sociedad libre de clases de Estados Unidos, donde la libertad y el trabajo duro te garantizan una verdadera movilidad social. Los blancos pobres miserables y sin tierra han existido desde la época del primer asentamiento colonial británico hasta los actuales 'hillbillies'. Marginados como clase, la escoria blanca siempre ha estado en el centro de los principales debates políticos sobre el carácter de la identidad estadounidense. Reconocemos la injusticia racial como una mancha desagradable en la historia de Estados Unidos. Con este libro tendremos que enfrentar la verdad sobre la naturaleza duradera y malévola de la clase también.
Con sabiduría y amenidad, Rüdiger Safranski traza en esta obra la biografía del Romanticismo -ese excepcional movimiento que eclosionó en el paso del siglo XVIII al XIX- a través del retrato y del análisis de autores como Herder, Fichte, Schelling, Hoffmann o Schiller. A continuación explora la continuidad y pervivencia hasta la actualidad de «lo romántico». Safranski nos descubre que si el movimiento romántico nos sigue fascinando en la actualidad es porque sus autores ya intuyeron las tensiones a las que hoy debemos enfrentarnos: el imperio de la técnica y la nostalgia del retorno a la naturaleza, la desdivinización del mundo y la ironía como consuelo ante el dolor de la existencia.