Un viaje apasionante a través de la historia para descifrar los enigmas petrificados que atesora la ciudad del Vesubio.
¿Sabías que se han encontrado extravagantes grafitis con un oculto mensaje?, ¿o que los muros de una domus conservan un enigma religioso que revolucionó el mundo científico? ¿Y que el Vesubio no erupcionó un 24 de agosto?
Situada más cerca del Vesubio, las cenizas golpearon con mayor fuerza sobre Herculano que quedó sepultada por completo. Por ello, frescos, mosaicos, casas, termas y tabernas están conservadas de forma impecable, mejor aún que en Pompeya, para dejar constancia del lujo que envolvía la ciudad antes de la erupción del volcán.
En estas páginas descubriremos la vida social de sus ciudadanos llegando a ver las facetas más personales y sentimentales, desde sus pertenencias y gustos hasta sus propios cuerpos. Observaremos las grandes estructuras que se han conservado milagrosamente debido al flujo piroclástico del volcán Vesubio expulsado en el año 79 de nuestra era y conoceremos a figuras importantes que han aportado al estudio de la historia romana.
Este es un libro acerca de la vida en la Rusia urbana en el apogeo del estalinismo. Trata de viviendas comunitarias atestadas, de esposas abandonadas y esposos que no pagaban los alimentos de sus hijos, de falta de comida y ropa, de colas interminables que consumían la jornada de las amas de casa. De lo que significaba ser un privilegiado en la sociedad estalinista, o uno de los tantos millones de marginados o parias. Trata de la vigilancia policial y las epidemias de terror. Atendiendo a las vicisitudes de una vida cotidiana atravesada por la excepcionalidad y los sobresaltos, pero también a los “relatos” que circulaban entre los ciudadanos para darle sentido a la dificultad extrema, Sheila Fitzpatrick ha escrito un libro fascinante sobre las estrategias de las personas comunes, entre la desesperación y el cálculo, entre la victimización, la pasividad y las convicciones genuinas.
En 1839 los rumores sobre unas extraordinarias ruinas de piedra enterradas en las selvas de Centroamérica llegaron a oídos de dos de los exploradores más intrépidos del mundo.
Cautivados por las noticias, el diplomático norteamericano John Lloyd Stephens y el artista británico Frederick Catherwood —ambos ya conocidos por sus aventuras en Egipto, Tierra Santa, Grecia y Roma— zarparon del puerto de Nueva York en una expedición a las inhóspitas selvas de los territorios actuales de Honduras, Guatemala y México.
Lo que descubrieron cambiaría drásticamente el entendimiento de Occidente respecto a la historia humana.
«America, land of opportunity», ¿cuándo se forjó la leyenda? ¿Qué empujó a hombres, mujeres y niños a emigrar por miles a la costa del Pacífico? ¿Le suenan los nombres de Jesse James, Toro Sentado y Buffalo Bill? ¿Cómo prosperaron Luzena Wilson o Belinda Mulrooney? ¿Qué se escondía tras el oro de las minas de Colorado? ¿Cuál era realmente la ley de la frontera? ¿De qué modo defendieron los lakota las Colinas Negras frente a los crow y los invasores blancos? ¿Sabía que aquí nació la barbacoa moderna y que un español fue el primer foráneo en hablar de ella? ¿John Wayne o Clint Eastwood: qué hay de cierto en la imagen que nos ha llegado de los vaqueros? Además de la afición al póquer y los rodeos, ¿qué legó el Oeste a los Estados Unidos?
La historia del lejano Oeste permanece envuelta en las brumas del mito y la ficción, y la naturaleza turbulenta y salvaje de este tiempo de asaltos a trenes, violentos tiroteos, peligrosos arreos de ganado y mortales emboscadas indias no parece alejarse mucho de esa idea literaria. Pero ¿qué fue de verdad aquel mundo aparte más allá del Misisipi? Nada más y nada menos que la tierra donde hundió sus raíces el sueño americano.
Una vuelta al mundo a través del lenguaje y la nieve
Cada idioma tiene sus propias palabras para los mágicos e hipnóticos copos que caen del cielo. En esta exquisita exploración de la nieve, la escritora y viajera ártica Nancy Campbell, autora de la elogiada La biblioteca de hielo, profundiza en los significados de cincuenta palabras para designar la nieve.
En japonés nos encontramos con yuki-onna, una «mujer de nieve» que recorre a la deriva la tierra escarchada. En islandés tenemos hundslappadrífa, «copos de nieve tan grandes como la pata de un perro». Y en maorí hablan de Huka-rere, «uno de los hijos de la lluvia y el viento».
Desde las cimas de las montañas y los mares helados hasta los parques urbanos y las colinas desérticas, cada uno de estos cristales de nieve lingüísticos ofrece todo un mundo de mitos e historias.
Sonia Taravilla es una profesional del sector cultural que desde hace una década gestiona la exitosa cuenta en redes sociales El Sereno de Madrid. A través de sus redes y bajo el seudónimo de “El sereno” da a conocer aspectos históricos, artísticos y sociales de Madrid a través de los siglos, haciendo hincapié en el XIX y XX.
En su primer libro a modo de crónica social homenajea a los habitantes de la Villa y Corte, representados por sus oficios y dando a conocer tanto a personajes ilustres como anónimos, quienes con sus vivencias y experiencia contribuyeron a dar a la ciudad su inigualable personalidad.