Dientes: una historia de ciencia y evolución.
Además de su función biológica, los dientes hacen las veces de archivos de la historia. Los restos de Atapuerca y los yacimientos denisovanos, pasando por neandertales y momias egipcias, han revelado secretos sobre dietas, enfermedades y costumbres ancestrales. Los dientes también han sido símbolos de poder, herramientas de supervivencia y obras de arte, convirtiéndose en testigos privilegiados de la evolución.
El viaje de la odontología es un testimonio del ingenio humano. La evolución es notable: sangrías medievales sustituidas por radiología digital y prótesis de marfil reemplazadas por sorprendentes técnicas de implantología. Esta disciplina ha abandonado siglos de superstición para emerger como una ciencia de verdadera vanguardia. Hoy, sus avances no solo transforman sonrisas, también abren nuevas fronteras en la medicina y el diagnóstico de enfermedades.
José Ramón Alonso, reconocido divulgador científico, nos guía por milenios de historia en esta fascinante metamorfosis de la odontología. Estas páginas revelan los procedimientos más insólitos y los momentos decisivos que han revolucionado la salud dental en los cinco continentes. Una perspectiva única de cómo una rudimentaria práctica se ha convertido en pilar de la salud pública actual. Porque, como sabiamente apuntó Cervantes: «En mucho más se ha de estimar un diente que un diamante».
Chris Wickham ofrece una reinterpretación extraordinariamente rica de la economía mediterránea entre los años 950 y 1180. Esta obra magna destinada a convertirse en una referencia ineludible para futuros historiadores, invita a los lectores a repensar por completo la lógica subyacente a los sistemas económicos medievales, así como la propia concepción que tenemos de la época en su conjunto. Basada en cinco estudios exhaustivos de casos regionales desde Italia hasta Egipto, su tesis marca un cambio de paradigma respecto a lo que conocíamos: fue a orillas del Mediterráneo donde en realidad la economía fundada en la época romana tuvo continuidad. La dinámica del sistema económico medieval combinaba redes internas (el recorrido a lomos del asno) y rutas de intercambio (el viaje en la nave). Y por último, tópicos como el oscurantismo se demuestran como obsoletos, al estar basados en datos incompletos. A través de la arqueología disponible en la actualidad, Wickham revela cómo funcionaban realmente las relaciones entre las economías de la época medieval e ilumina una nueva comprensión sobre ella.
Esta obra ofrece una lectura de la evolución del derecho penal desde la óptica de la teoría de medios y el análisis sociocultural. Examina el modo en que la sucesión de las diferentes constelaciones mediáticas, de la oralidad a las redes digitales, ha ido moldeando las prácticas y el concepto mismo de justicia. Además, sostiene que buena parte de las crisis del derecho penal contemporáneo están conectadas a la influencia de los medios audiovisuales en nuestra imaginación penal. Fenómenos como el punitivismo, el deterioro de la discusión político-criminal, el auge de la estigmatización digital y los juicios mediáticos o la expansión de la legislación simbólica serían, en suma, signos de un cambio cultural profundo que coloca al derecho penal en un lugar diferente al que se le asignó hasta el cambio de siglo.
Cuando una multitud asaltó la Bastilla en julio de 1789, se cerró una etapa histórica y nació un mundo nuevo. La mayoría de los historiadores explican la Revolución francesa como el resultado de condiciones subyacentes: una economía tambaleante, tensiones sociales o la influencia del pensamiento ilustrado. Pero ¿qué creían los propios parisinos que estaban haciendo? ¿Cómo entendían su mundo? ¿Cuáles eran las motivaciones y aspiraciones que guiaban sus acciones?
En esta deslumbrante obra, resumen y resultado de toda su carrera, Robert Darnton aborda estas preguntas tras décadas de minuciosa investigación para evocar un pasado de forma tan vívida como lo haría con las noticias de ayer. Su retrato del París del siglo XVIII es el de una sociedad de la información muy parecida a la nuestra, con sus circuitos de noticias centrados en cafés, parques y bajo el Árbol de Cracovia del Palais-Royal.
A través de panfletos, rumores, boletines clandestinos y actuaciones públicas, se incorporaron a la agitada conciencia colectiva de los parisinos de a pie los eventos de cuarenta años intensos: desde tratados desastrosos, corrupción institucional y libertinaje real hasta emocionantes ascensos en globos aerostáticos y nuevas ideas acerca de la nación. A medida que la confianza pública en la autoridad real se erosionaba y se abrían nuevos horizontes para los ciudadanos, sin darse cuenta estos fueron preparándose para la revolución.
La autoridad y el firme pulso de Darnton permiten a los lectores navegar exhaustivamente por las pasiones y complejidades de la política de la corte, la doctrina de la Iglesia y la economía. Su prosa iluminadora propicia una apasionante lectura. El resultado es una narración fascinante que logra hacer del pasado una presencia viva.
En 1997 se publicó El libro negro del comunismo (la española fue la primera traducción del mundo), un título que se convirtió en un best seller mundial, con traducciones a veinticinco idiomas. Desaparecido de las librerías españolas desde hace tiempo, vuelve ahora este clásico contemporáneo, cuya vigencia ha quedado demostrada por la actualidad política. Esta edición, con vocación de definitiva, ha llevado a cabo una exhaustiva revisión del texto, corrigiendo errores y erratas, una mejorada versión de la cartografía y un prólogo del coordinador de la obra que hace balance de veinticinco años de vida de un libro que asombró al mundo y cuya vigencia no ha decaído un ápice. En palabras de Courtois: 'la masa de información proporcionada por este libro en 1997 no solo no ha sido desmentida, sino que, por el contrario, se ha confirmado continuamente por el trabajo de historiadores de todo el mundo'. Las características físicas de esta edición permiten disfrutar de una obra capital como nunca antes.
La Segunda Guerra Mundial en el mar ofrece una perspectiva global, centrándose en las principales batallas y en las personalidades más destacadas, poniendo de manifiesto tanto su magnitud como sus interrelaciones: Scapa Flow, la batalla del Atlántico, Dunkerque, la Regia Marina de Mussolini, el poderío naval japones en el Pacífico, Pearl Harbor, la batalla de Midway o los desembarcos en el Norte de Çfrica y más tarde en Normandía.
Tambien están los destacados dirigentes navales: Roosevelt y Churchill, que se autoproclamaban "hombres de la Armada", Karl Dönitz, François Darlan, Ernest King, Isoroku Yamamoto, Erich Raeder, Inigo Campioni, Louis Mountbatten o William Halsey.
Democracia para realistas arremete contra la romántica teoría vulgar en la que se asienta el pensamiento contemporáneo sobre política y gobierno democráticos, ofreciendo una provocadora visión alternativa centrada en la naturaleza humana de los ciudadanos democráticos. Gracias a una amplia variedad de pruebas procedentes de las ciencias sociales, incluidos ingeniosos e inéditos análisis sobre temas que abarcan desde el aborto y los déficits presupuestarios hasta la Gran Depresión y los ataques de tiburón, Christopher Achen y Larry Bartels desmienten la imagen generalizada de ciudadanos concienciados que dirigen el rumbo del Estado desde las urnas de votación. Argumentan que los votantes -incluso los mejor informados y más implicados- eligen partidos y candidatos en función sobre todo de sus identidades sociales y lealtades partidistas, no de cuestiones políticas. Además, demuestran que los electores ajustan sus opiniones políticas e incluso sus propias percepciones sobre asuntos objetivos para que se correspondan con dichas lealtades. Cuando los partidos están más o menos igualados, las elecciones a menudo dependen de consideraciones irrelevantes o engañosas, como repuntes económicos o recesiones que escapan al control de los gobernantes; en esencia, los resultados son aleatorios. Así pues, los electores no dirigen el rumbo de las políticas públicas, ni tan siquiera de forma indirecta.
El impacto que las ruinas monumentales de la antigua Roma tienen hoy sobre el visitante no pude ser sino pálido reflejo de lo que sintieron aquellos que las conocieron en su esplendor. ¿Cómo no sentirse deslumbrado, apabullado, insignificante, ante el Coliseo? ¿Cómo no sentirse parte de algo enorme, todopoderoso y eterno, de un imperium sine fine, al visitar los templos del Capitolio o pasar bajo un arco que celebraba victorias conseguidas donde acababa el mundo? ¿Cómo no pensar que el emperador era casi un dios cuando el sol sacaba destellos al coloso de Nerón o cuando disfrutabas de la munificencia de Caracalla en unas suntuosas termas? En Roma, como también actualmente, la arquitectura y el ordenamiento urbano no son inocentes, y este libro muestra el impacto que los edificios y programas edilicios tuvieron sobre la conciencia pública de los romanos, sobre su propia imagen y percepción, y sobre las relaciones entre emperador y súbditos.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel (1770-1831) impartió sus lecciones de filosofía del derecho a lo largo de siete cursos entre 1817 y 1825. Esta nueva edición crítica ofrece la suma de este work in progress reuniendo por primera vez en castellano la integridad de los niveles textuales (epígrafes, comentarios, apostillas y acotaciones) con sus distintas notas y variantes. El lector ve así configurarse la trabazón lógica del sistema a partir del rico universo de referencias filosóficas, jurídicas e históricas como la tarea de «captar su época en pensamientos».
El análisis de la justicia y la política alemanas de los años 20 y primeros 30 del pasado siglo sirven en este ensayo para comparar el proyecto liberal conservador y el republicano como las dos formas que marcaron el enfrentamiento ideológico europeo antes del ascenso de los totalitarismos.
En una carta enviada al dictador Francisco Franco en septiembre de 1945, Ramón Serrano Suñer sostenía que, antes del final de la Segunda Guerra, 'las tres formas políticas genéricas de nuestro tiempo eran: democracia liberal, fascismo o comunismo'; y que ante aquella disyuntiva, la decantación totalitaria española fue la más conveniente. Desde aquel entonces, el momento político de la primera posguerra ha solido encajonarse en el citado trilátero. La presente monografía plantea un ángulo de observación alternativo, tomando el caso alemán como categoría europea. El espíritu político de los años 1920 y primeros 1930 resulta más eficazmente captado a través de la contraposición entre dos proyectos liberales nacionales: el conservador y el republicano. Sus implicaciones políticas saltan bien a la vista desde el observatorio que proporciona el derecho constitucional y la teoría del Estado. Sobre estos postulados, se examinan la opinión conservadora y el parecer demócrata sobre la figura constitucional republicana, la democracia pluralista, el Estado de partidos, el gobierno parlamentario, la supremacía de la ley, la vinculación constitucional y legal de los jueces, los derechos fundamentales, el papel de la alta burocracia, el estatuto de los cuerpos intermedios o el alcance de los poderes de excepción. Se han redactado estas líneas con el afán de reconstruir un intervalo jurídico fundacional, mas ya cancelado, aunque con la impresión creciente de estar escribiendo sobre desafíos y peligros que vuelven a emerger entre nosotros.