«De joven fui de izquierdas, pero luego maduré» es la frase en la que Toni Cantó plasma la profunda desilusión de un verdadero converso. A través de un repaso de su propia biografía -su paso época como modelo profesional, la movida madrileña, su exitosa carrera de actor y presentador de televisión, sus inicios como diputado y su actual actividad en la política-, el autor analiza el camino vital e intelectual que lo ha llevado desde la izquierda a la derecha. El resultado es este libro, sincero y no menos polémico, con el que muchos se sentirán identificados, y que trata temas como la justificación de la violencia, la censura, la superioridad moral, el nacionalismo y la cursilería en política. Sin medias tintas, estas memorias son un verdadero aporte para la discusión y una defensa de los valores de la libertad.
«En mi habitación pegué un póster del Che Guevara. Y en el radiocasete ponía a Lluís Llach y cantaba los coros de L'estaca. Miraba mal a los curas y a las monjas. Hablaba de la sanidad cubana y del arte ruso sin conocerlos... El capitalismo era el infierno y Estados Unidos, el demonio; pero yo quería un walkman, el Levis de etiqueta roja y soñaba con visitar algún día Nueva York».
Ludwig van Beethoven fue un artista hecho a sí mismo, creador de una música que, a día de hoy, sigue conmoviéndonos. Pero ¿quién fue el joven Ludwig, antes de convertirse en Beethoven?
Nacido en el seno de una familia humilde de Bonn, el pequeño «Luddi» tiene que afrontar desde tierna edad una vida difícil, dirigida con ritmo despótico por un padre alcohólico y endeudado, que quiere sacar partido de su talento en bruto y le exige una y otra vez que deje de componer sus propias piezas, y que toque al piano únicamente lo que se espera de él...
Mikael Ross ha imaginado al joven genio tomando como referencia los diarios reales que escribieron los Fischer, los vecinos de los Beethoven en Bonn, que ofrecen un retrato atípico de la disfuncional familia que habitaba la vivienda de arriba y que sin embargo alumbró a uno de los mayores genios de la Historia. El resultado es una experiencia inmersiva y fascinante, a medio camino entre el drama social y el humor.
Existen innumerables obras de viajes por las tierras más exóticas. Pero ninguna donde la travesía se prolongue cuarenta años. Esta gesta, al alcance de muy pocos, ha marcado la existencia de uno de los aventureros más extraordinarios del siglo XX. Y también uno de los más generosos y entregados.
Quien se adentra en las páginas escritas por este pionero de los hielos del Ártico tendrá la extraña sensación de sumergirse en un mundo casi desaparecido. Pero como les sucedió a quienes leyeron estas crónicas en los años cincuenta y sesenta, viajarán con su imaginación por las tierras que se extienden desde las regiones akulurakeñas hasta la desembocadura del Yukón.
La vida se hace aquí literatura y la literatura cobra vida. Los azarosos viajes en trineo se entremezclan con las crónicas de la vida en la tundra implacable. Los retratos de personajes singulares y llenos de humanidad, casi primitiva, se interrumpen con las reivindicaciones políticas en el Congreso de Alaska en favor de unas mejores condiciones de vida. Y todo ello salpicado de interesantes reflexiones sobre los valores y motivaciones que hacen a los hombres hermanos de camino en cualquiera de los puntos cardinales.