Pocos conflictos han generado tal cantidad de libros como la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, prácticamente ninguno se detiene a analizar el papel que jugó el radar en ese conflicto.
Este dispositivo permitió a los contendientes detectar de manera anticipada los movimientos de los adversarios tanto por mar como, sobre todo, por aire.
La obra, abundantemente ilustrada con imágenes y fotografías de la época, recorre la historia del radar, desde sus orígenes en el siglo XIX hasta la Segunda Guerra Mundial y los años inmediatamente posteriores.
Es cuestionable afirmar que el radar ganó la guerra, pero sí contribuyó decisivamente a que los aliados obtuviesen la victoria en ciertos escenarios. Y no solo eso, sino que, como explica bien este libro, el radar cambió decisivamente el mundo.
Jacques-Alain Miller creó en mayo de 2017 una red política lacaniana que denominó ZADIG: Zero Abjection Democratic International Group. Planteada como una extensión de las Escuelas del Campo freudiano, su intención era que el discurso psicoanalítico incidiera en la política de su tiempo según las particularidades de cada lugar.
Este primer volumen reúne una selección de artículos de setenta y siete autores, pensadores de distintos campos de la cultura y psicoanalistas, que se han interesado en incidir en la política desde sus discursos particulares. Concernidos por la emergencia de diferentes realidades que sacuden nuestra cotidianeidad, han aportado su lectura e interpretación en el blog de Zadig España.
El libro es parte de una sostenida labor de difusión y acción de la red ZADIG España. Es nuestro deseo que aquellos que se interroguen por la subjetividad de su época encuentren en él aportaciones para su propia praxis. Pensamos que la lectura de los distintos ejes temáticos que agrupan estos escritos, orientados por la defensa de la libertad de la palabra de la democracia y del Estado de derecho, puede contribuir a pensar algunos impasses que conmocionan nuestro tiempo.
Mientras Berlín se iluminaba fantasmagóricamente con las piras donde ardían libros prohibidos, los nazis llevaban a cabo un crimen cultural de proporciones aún mayores. A través de una pormenorizada investigación, en Ladrones de libros. El saqueo nazi de las bibliotecas europeas y la lucha por recuperar la herencia literaria Anders Rydell ha documentado el saqueo de bibliotecas, públicas y privadas, y librerías que, a lo largo y ancho de la Europa ocupada, llevaron a cabo las tropas alemanas. Los anaqueles de judíos, comunistas, políticos liberales, activistas por los derechos LGTB, católicos, masones y de cualquiera que entrara en la larga lista de enemigos del régimen, fueron expoliados y las obras que contenían esgrimidas como armas intelectuales contra sus dueños. Pero, en paralelo, Ladrones de libros es la historia cuasi detectivesca de cómo un heroico puñado de bibliotecarios, y con ellos el propio autor, han emprendido la tarea de devolver estos libros a sus dueños legítimos. Para ello, han peinado las bibliotecas públicas de Berlín con el fin de tratar de identificar los volúmenes robados y han intentado dar con los familiares de aquellos que fueron despojados. En muchos casos, estos libros son el único objeto que los descendientes de víctimas del Holocausto podrán tener entre las manos como un recuerdo. La Segunda Guerra Mundial fue también un conflicto cultural y el estudio y refutación de toda la literatura «degenerada» que los nazis expoliaron pretendía justificar el deseo de Alemania de dominar el mundo y derrotar a sus enemigos con la «ciencia», así como sentar las bases intelectuales sobre las que descansaría el Reich de los mil años. Un Reich que se levantaría no solo sobre sangre y piedra, sino también sobre palabras.