La extraordinaria operación de rescate llevada a cabo en la embajada iraní de Londres en 1980, un evento histórico que marcó un hito en las operaciones de fuerzas especiales y capturó la atención mundial.
El 30 de abril de 1980, seis hombres armados irrumpieron en la embajada iraní en Princes Gate, delante del Hyde Park de Londres. Allí tomaron como rehenes a 26 personas, incluyendo al personal de la embajada, visitantes y tres ciudadanos británicos. Luego siguió un tenso asedio de seis días retransmitido en directo y visto por millones de espectadores en lo que se convirtió en el boletín de noticias más largo en la historia de la televisión británica, Negociadores y psiquiatras buscaron una solución pacífica al enfrentamiento, mientras que el SAS – hasta entonces una organización envuelta en secreto – planeaba una audaz misión de rescate: la operación Nimrod.
Basándose en material de fuentes inéditas, entrevistas exclusivas con el SAS y testimonios de rehenes, negociadores, oficiales de inteligencia y el psiquiatra en el lugar, el historiador superventas Ben Macintyre lleva a los lectores en un apasionante viaje que comienza en las semanas o años, anteriores de preparación de ambos lados, hasta el relato minuto a minuto del asedio y del rescate.
Operación Biting arroja luz a uno de los momentos históricos más emocionantes y menos conocidos de la segunda guerra mundial.
En su nuevo libro, Max Hastings narra la historia de la Operación Biting, uno de los asaltos de comandos paracaidistas británicos más emocionantes y probablemente el más exitoso de la segunda guerra mundial.
En febrero de 1942, la inteligencia de la RAF descubrió una nueva red de radar alemana en la costa de la Europa ocupada conocida como Würzburg. Esta innovación tecnológica ponía en jaque a las fuerzas aliadas, así que la inteligencia británica propuso un asalto para capturar componentes clave. La operación se llevó a cabo la noche del 27 al 28 de febrero, cuando 120 hombres de las Fuerzas Aerotransportadas fueron lanzados en paracaídas sobre Bruneval, Normandía, en medio de una tormenta de nieve. A pesar de errores de cálculo que dejaron a algunos soldados lejos de su objetivo, lograron desmontar el radar enemigo, enfrentarse a la Wehrmacht y escapar por mar en un audaz rescate hacia Portsmouth.
Max Hastings relata este episodio histórico lleno de suspense con detalles previamente no documentados, a la vez que retrata los personajes clave involucrados: desde el científico que diseñó la operación hasta el carismático Lord Mountbatten, pasando por el ingeniero Charlie Cox, quien desmanteló el radar, los agentes secretos franceses que arriesgaron sus vidas en misiones de reconocimiento y el mayor John Frost, líder de los paracaidistas en acción. Operación Biting arroja luz a uno de los momentos históricos más emocionantes y menos conocidos de la segunda guerra mundial.
La historia de cómo las prácticas habituales de violencia de los imperios europeos redefinieron los contornos del mundo.
"A la rapiña, el asesinato y el robo los llaman con nombre falso gobernar, y donde crean un desierto, lo llaman paz", Tácito puso estas palabras en boca de quien defendía sus tierras ante las legiones romanas. A partir del siglo XV, los imperios europeos llevaron estas antiguas prácticas a una escala nunca vista, cimentando sus conquistas en saqueos, esclavitud y pillaje generalizados. Autoafirmándose en un derecho al uso de la fuerza unilateral, estos imperios consiguieron acumular a través de los años un poder global. En un relato que abarca desde Asia hasta América, Lauren Benton muestra cómo la violencia ejercida por los imperios definió la naturaleza misma de la guerra y la paz. Los constantes enfrentamientos y las intervenciones armadas instauraron un estado de guerra de facto perpetua en todo el mundo. Estas disputas intermitentes desencadenaron atrocidades, desde masacres repentinas hasta largas campañas de despojo y exterminio.