«Aquel que franquea el portal donde se alza Arbeit macht frei entra en un mundo radicalmente distinto, lejos de los dioses, lejos de los hombres... El pánico en estado puro, sin voz, sin palabras.»
Todo se vino abajo en otoño de 1942 para Hélène Waysbord cuando, con apenas seis años de edad, sus padres fueron deportados y ella fue escondida en una zona rural francesa. Teóricamente a salvo, pero con la identidad perdida.
En una sucesión de cortos capítulos deambulando entre el presente, el pasado y la mitología, la autora nos cuenta cómo la figura de Aquiles le ha dado sentido a su vida personal, pero también a su vida de mujer comprometida con nuestra historia contemporánea. Una emotiva reflexión sobre cómo los mitos ayudan a tender puentes allí donde la vida rompe las certezas, y cómo al contemplar a los héroes antiguos con las mismas debilidades e inquietudes que las nuestras se nos confirma que toda vida es, en el fondo, un retoque mitológico.
El 23 de noviembre de 1221 nace en Toledo el rey Alfonso X,
llamado el Sabio, y a los pocos meses será nombrado heredero en la nueva catedral de estilo gótico de Burgos.
Cuando en 1252, tras la muerte de su padre Fernando III, Alfonso X se convierta en rey de Castilla y León, la situación del reino será muy distinta a la de cuando nació. El monarca vivirá una expansión sin precedentes de las fronteras de los reinos hispanos hacia el sur, que incluso alcanzará el otro lado del Estrecho.
Es aquí, en esta tierra fronteriza constantemente
rebasada por el empuje cristiano, donde se constituirá
una organización del Estado cuya acción tendrá como
resultado la nación española, que aglutinará frente al
islam a una población muy variada procedente de todas
partes de la Península. Gallegos, vascos, castellanos,
aragoneses o catalanes, entre otros, se fundirán por la
doble vía del reparto territorial y del enlace genealógico
(del patrimonio y del matrimonio), y todos ellos adquirirán
la condición de españoles. A partir del siglo XIII España
se transformará en una nación clave de la historia cuya
influencia alcanzará escala global.
En un imponente castillo gótico situado en la cima de una colina, en el corazón de la Alemania nazi, un variopinto grupo de oficia les aliados pasó la segunda guerra mundial intentando escapar de sus captores nazis.
Durante cuatro años estos prisioneros pusieron a prueba los muros de Colditz con ingeniosos intentos de fuga que se convertirían en leyenda. Pero, como demuestra Macintyre, la verdadera historia fue aún más sorprendente. Los reclusos representaban una sociedad en miniatura, llena de héroes y traidores, con conflictos de clases y alianzas secretas, y toda la gama de la alegría y la desesperación humanas. Los nombres más famosos de Colditz comparten espacio con personajes menos conocidos, desde los elitistas miembros del Club Bullingdon hasta el paracaidista estadounidense reconocido como el agente secreto menos exitoso de su país.
Combinando la intriga de la época y agudos retratos psicológicos de sus exitosos relatos de espías de la vida real, Macintyre ha insuflado nueva vida a uno de los mejores episodios de guerra jamás contados. Profundamente investigado, lleno de increíbles historias humanas, y con la maestría narrativa de Macintyre, este es el libro definitivo sobre el castillo de Colditz.