Margarita Nelken va enlazando las escritoras españolas desde los albores del cristianismo, con la influencia de Córdoba y las princesas eruditas, a las juglaresas y soldaderas tanto moras como judías, llegando a finales del siglo XIV con uno de los primeros textos que se conservan en lengua castellana, el testamento de Doña Leonor López de Córdoba. Así va desgranando a consejeras de reyes, a místicas, a visionarias y endemoniadas, sabias, catedráticas y traductoras, mujeres eruditas, con fragmentos de sus cartas y textos. Aparecen María de Zayas y la escuela cínica, las novelas de caballerías, las dramaturgas y las consejeras de reyes. El feminismo de antaño, las poetas, las tertulianas, hasta llegar a las grandes del siglo XIX: Fernán Caballero y Emilia Pardo Bazán.
Un libro que llega a tiempo
¿Género? ¿Coeducación? He aquí dos conceptos con los que muchas maestras y profesoras llevamos años trabajando, pensando, imaginando, para proponer un conjunto de cambios fundamentales en la educación, para hacerla realmente igualitaria entre niños y niñas, entre chicas y chicos. A menudo hemos oído: ?pero, ¿por qué? La educación ya es igualitaria, ya van a las mismas escuelas, las chicas tienen mejores notas??. Comentarios bien intencionados pero mal informados, porque nosotras sabemos que la educación sigue siendo sesgada, pensada para los chicos, portadora y transmisora de unos géneros estereotipados que perpetúan y naturalizan diferencias y desigualdades entre hombres y mujeres.
Ha llegado el momento de cambiar sistemáticamente la educación. Por suerte, no partimos de cero. El trabajo callado de tantos años ha permitido analizar el cómo y por qué se produce la transmisión de los géneros, y ha permitido también crear modelos de acción para introducir y evaluar los cambios. Es ya una larga historia: el diagnóstico está hecho, por lo menos en gran parte; las soluciones están pensadas, sólo falta aplicarlas profusamente.