Unas memorias singularísimas de la familia Mitford, escritas por una de las autoras más conocidas e importantes del siglo xx.
Deborah Mitford, o Debo, como siempre la conocieron todos sus amigos, duquesa de Devonshire, fue la más pequeña de las hermanas Mitford, una de las familias más singulares si no de la historia sí de las últimas décadas con absoluta certeza. Este libro, un auténtico monumento familiar a los Mitford, ejerce a modo de crónica auténticamente memorable de una vida vivida al límite. De una infancia singular, cuando menos, pero feliz en la campiña de Oxfordshire, al té en compañía de su hermana Unity y Hitler allá por el año 1937, o su matrimonio con Andrew Cavendish, el segundo hijo del duque de Devonshire.
Escritas con la calidez propia de la nostalgia, estas memorias constituyen un retrato único y certero de una época tumultuosa, esplendorosa y de cambio. El vestigio de un mundo largo tiempo olvidado.
Nace un escritor mientras muere un hombre. Neruda. Lluvia, montaña y fuego retrata los primeros y últimos pasos del poeta chileno como hombre, antes de consumarse como letra. Su infancia, asolada por ese padre estricto y tendencioso, voraz y destructor de sus primeros escritos. Casi al simultáneo, su vejez, acosada por la sombra y consumación de la dictadura, por el cansancio, por la disminución. Y en el intermedio la poesía, el amor, aquel salirse de sí mismo y volverse otro, convertirse en verso.
Esta extraordinaria obra es un elegante y absorbente recorrido por Tokio y sus habitantes. Durante más de doscientos años, desde 1632 hasta 1854, los gobernantes de Japón restringieron el contacto con el extranjero, un aislamiento que fomentó una cultura notable y única que perdura hasta nuestros días. Durante este periodo, los habitantes de la ciudad de Edo, más tarde conocida como Tokio, confiaban en sus campanas públicas para dar la hora. Anna Sherman relata su búsqueda de las campanas de Edo, explorando la ciudad de Tokio y la relación individual y particular de la cultura japonesa con el tiempo, la tradición, la memoria, la transitoriedad y la historia. A través de los viajes y de su amistad con el propietario de una pequeña y exquisita cafetería, que eleva la preparación y el consumo de café a una forma de arte, Sherman sigue testimonios cautivadores: una anciana recuerda haber escapado de las bombas incendiarias estadounidenses de la Segunda Guerra Mundial; un científico construye el reloj más preciso del mundo, un reloj que no perderá un segundo en cinco mil millones de años. Este es un libro que aborda como ningún otro la sorprendente otredad de la cultura japonesa.