Pasa, lectora, lector, estás en tu fiesta. Más que un libro, este objeto es un carnaval de cincuenta estaciones que desfila tras las bambalinas de la cultura mexicana. En él participan Tin Tan y Pita Amor, María Félix y Monsiváis,Piporro y Tongolele, Nahui Olin y Jorge Ibargüengoitia, los beats y Marilyn Monroe, Vitola y José Revueltas. Entre muchos, muchos otros. Mientras pasan, nos van contando de sus vicios, supersticiones, sus pleitos y apodos, los cuadrángulos amorosos que formaron y los cabarés que visitaron. Guiados por la insaciable curiosidad de Julia Santibáñez, nos enteramos de quiénes fueron huéspedes de Lecumberri y quiénes invitados a la casa de Carlos Fuentes; qué escritores la hicieron de actores y qué libros ypelículas gozaron de la mercadotecnia inversa de la censura y por qué. Encuentra aquí lo que los libros ceremoniosos nunca dirán sobre escritores, artistas e intelectuales.
En sus 30 años como periodista, Harris Whitbeck ha viajado a los lugares más peligrosos del mundo para narrar acontecimientos históricos. Por su impecable profesionalismo, fue reconocido con un Emmy especial en 2002. Esta obra relata el detrás de cámaras de su labor periodística y sus recuerdos por los países que visitó para llevar al lector las más poderosas historias. Con un punto de vista crítico y entrañable, desde sus inicios en CNN en Español, Whitbeck ha cubierto sucesos como el huracán Mitch en Centroamérica, el tsunami de 2004 en Indonesia, los disturbios políticos en Haití y Venezuela, las guerras de Irak y Afganistán, y la disolución de la Unión Soviética. El centro de este libro es una anécdota emotiva sobre el vínculo con su profesión y su natal Guatemala. El oficio de narrar sin miedo es una oportunidad única para descubrir, a través de la mirada del autor, la realidad compleja en la que vivimos: guerras, miseria e injusticia que atraviesan y lastran nuestro presente. «Al enfrentarme a desafíos enormes y verme cara a cara con la desgarradora violencia de la guerra, afronté mi propio temor a la muerte, me di cuenta de que el miedo pierde su fuerza cuando se le encara».
Cristóbal Colón tuvo dos hijos: Diego, nacido de su matrimonio con la portuguesa Felipa Moniz, y Hernando, el bastardo fruto de su relación con la cordobesa Beatriz de Arana en los años en que,ya instalado en Castilla, el genovés intentaba ganar el patrocinio de los Reyes Católicos para suproyecto descubridor. Al primogénito le legó sus títulos y los derechos contractuales pactados enlas Capitulaciones de Santa Fe; al menor la inteligencia, una determinación inquebrantable y el mandato de defender los privilegios y el nombre de los Colón Hernando, conocido como uno de los cortesanos con mayor erudición de las cortes europeas, se enfrentará no solo al poder, primero del rey Fernando el Católico y después del emperador CarlosI, con quien paradójicamente le unió la amistad, sino a funcionarios creadores de una red clientelar en torno a los beneficios económicos que deparaban las Indias.