Cómo identificar y rebatir las falacias de la izquierda radical.
Los progresistas se presentan como los defensores de la razón, la ciencia y la justicia social. Pero ¿qué ocurre cuando sus argumentos no resisten el más mínimo escrutinio?
En Mitos progres, el filósofo Michael Huemer desmonta, con datos y rigor, algunas de las ideas más influyentes y repetidas del progresismo actual: que la brecha salarial entre hombres y mujeres se debe al machismo; que los tiroteos policiales son sistemáticamente racistas; que el género es un mero constructo social, o que el cambio climático nos llevará a la extinción.
Con un estilo claro y valiente, Huemer demuestra que muchas de estas afirmaciones no son inocentes ni irrelevantes: son mitos ideológicos que distorsionan el debate público, polarizan a la sociedad y justifican políticas ineficaces —o directamente dañinas—. Y lo que es aún peor: se utilizan como armas morales para silenciar la disidencia y blindar una visión dogmática del mundo.
Este libro no pretende imponer una nueva ideología, sino recuperar algo más necesario que nunca: el respeto por los hechos, el pensamiento crítico y la libertad de disentir.
Las Leyes es, con mucho, el diálogo platónico más extenso que conocemos. Y no solo eso, sino que además es el que supone los más exhaustivos estudios: historia, teoría política, educación, códigos penales, sistemas constitucionales, teología, física, medicina, etc. Es el intento más antiguo que ha llegado hasta nosotros de organizar el sistema jurídico de acuerdo con principios racionales. En el primer volumen de los dos que reúnen las Leyes, se recogen los libros I-VI, en los que se establecen los principios fundamentales que deben regir la sociedad para luego crear la legislación acorde con ellos.
San Agustín es una de las personalidades más fascinantes y complejas de la historia del cristianimo. Una de sus más importantes obras es, sin duda, La ciudad de Dios, redactada en los años de la toma de Roma a manos de los visigodos. En ella se establece por primera vez la idea del paralelo entre Estado divino y Estado terrenal, de gran influencia histórica en la política y las leyes de la historia occidental.
Este volumen, que incluye los libros XVI-XXII, cierra la publicación íntegra de esta obra, culminando así la labor de Rosa Mª Marina Sáez con una espléndida traducción exhaustivamente anotada. En esta última parte, Agustín de Hipona recurre a la historia bíblica para explicar la evolución entre la ciudad de Dios y la terrenal; y a continuación recapitula todo lo dicho en la obra antes de acometer por último las finalidades de ambas ciudades: el juicio final, el infierno y el cielo.