Si hay un género literario capaz de ensimismarnos y regalarnos horas de placentera lectura, absortos en la resolución de algún enigma, en la persecución de un asesino o en la aclaración de un crimen más o menos sangriento, este es sin duda el género negro, la novela policiaca, también conocida como noir. Con la intención de desmontar los grandes tópicos que rodean a esta literatura, Eugenio Fuentes indaga en los orígenes históricos, sociales y literarios de un género que juega con la verdad y la mentira, con los problemas psicológicos de sus protagonistas o sus dificultades para relacionarse con el mundo y sus semejantes.
Ejemplar cultivador él mismo de este género, y creador del inolvidable personaje Ricardo Cupido, Fuentes se acerca en esta obra a los grandes autores de novela negra desde Poe o Conan Doyle hasta Stieg Larsson y explora personajes, tramas, emociones y toda la mitología propia de un género que explora nuestras miserias morales y que se desliza por la fina línea que separa el bien del mal.
Hay en la experiencia de leer una felicidad y libertad que resultan adictivas. La lectura libera. Se extiende a leer la vida, a leer quiénes somos y en dónde estamos. Anima las conversaciones de lector a lector. Se contagia por los lectores en acción: padres, maestros, amigos, escritores, traductores, críticos, editores, tipógrafos, libreros, bibliotecarios y otros promotores del vicio de leer.
Santa Teresa (1515-1582), mística, doctora de la iglesia y una de las pensadoras más extraordinarias de todos los tiempos, sigue hoy en día despertando pasiones, como hiciera ya en su época. Este libro aborda por vez primera interpretaciones de Teresa de Jesús como símbolo feminista, referente creativo y de identidad lingüística desde la óptica de escritoras latinoamericanas del siglo XX, como Delmira Agustini, Gabriela Mistral, Victoria Ocampo, Alfonsina Storni, Juana de Ibarbourou, Teresa Wilms Montt, Dulce María Loynaz, Silvina Ocampo, Mercedes García Tudurí y Alejandra Pizarnik. Las lectoras de Teresa esgrimen su nombre y apelan a su obra en la búsqueda de una genealogía femenina, mientras legitiman una visión propia del mundo y de la literatura.