Una historia fascinante sobre la adivinación en el mundo griego
Conocemos la antigua Grecia por su filosofía, arte y experiencias democráticas, pero también por sus oráculos. La adivinación está presente en la cultura griega, como en la historia del rey tebano Edipo, a quien el oráculo de Delfos profetizó que mataría a su padre y se casaría con su madre. Habitantes de un mundo incierto, los griegos confiaban en sus numerosos oráculos para orientar su vida y su época no se entiende sin estos centros de adivinación, en los que los dioses adoptaban la voz humana para comunicarse con los mortales.
Diego Chapinal-Heras, historiador especializado en la antigua Grecia y sus oráculos, nos ofrece una detallada y fascinante visión del mundo adivinatorio heleno. ¿Qué era un oráculo? ¿Cómo se llevaba a cabo la adivinación? ¿Qué importancia tenían en la sociedad griega? ¿Cómo evolucionaron con el tiempo? Para responder a estas y a otras preguntas viajaremos, de la mano de las más actualizadas fuentes documentales, epigráficas y arqueológicas, a oráculos como los de Dodona, Delfos, Dídima o Epidauro, y conoceremos lo que significaba ofrecer y recibir una profecía.
La voz de los dioses es un libro fundamental para comprender una de las facetas más fascinantes y misteriosas y menos estudiadas de la Antigüedad helena.
Hay ciudades que al nombrarlas estamos en ellas y las inventamos según la medida de nuestros deseos. José Carlos Llop ha ido a Vladivostok tantas veces como ha escrito su nombre; allí en tiempos finalizaba el Transiberiano; por ella se acuerda de Blaise Cendrars o de Miguel Strogoff, el correo del zar que, según Jules Verne, debía entregar su carta en Irkutsk y nunca llegó a Vladivostok. Puede ser una ciudad imaginaria, en la que se vean reflejados nuestros deseos, ensoñaciones y anhelos. La atmósfera literaria de estos artículos recogidos en Vladivostok, antología de sus «Terceras» publicadas en ABC entre 2006 y 2017, destaca por un estilo elegante y una ironía delicada e inteligente.
En Eso no estaba en mi libro de las guerras púnicas, viajamos hasta el siglo III a. C. para conocer, de primera mano, los principales acontecimientos y las grandes batallas entre dos ejércitos perfectamente adiestrados para el combate. A partir del 264 a.C., Roma y Cartago se enfrentaron entre sí, en una lucha a muerte con el único objetivo de destruir a su rival y conseguir la hegemonía en el Mediterráneo. Para ello contaron con la experiencia de valiosos generales como Aníbal Barca y Publio Cornelio Escipión, protagonistas de algunas de las batallas más memorables de todos los tiempos, como la de Cannas y Zama (que aún se estudian en las modernas escuelas militares).
Las guerras púnicas, por el volumen de los medios utilizados, así como por el espacio geográfico donde se llevan a cabo los principales hechos de armas, al igual que por los planes estratégicos y diplomáticos que persiguen ambos estados, son un conflicto prolongado que ha sido considerado por muchos como las guerras mundiales del mundo antiguo (por supuesto desde un punto de vista eurocéntrico), cuyo resultado es fundamental para comprender la historia actual. Con este libro, el lector conocerá el contexto y las causas profundas que motivaron el estallido del conflicto, se sorprenderá con los temidos corvus con los que los romanos hicieron frente a la todopoderosa armada cartaginesa y será testigo de excepción de las increíbles victorias militares de Aníbal Barca y de su épica travesía por los Alpes italianos. Un libro que, sin duda, no nos dejará indiferentes.