Se conoce con el nombre de «apócrifos» todos aquellos textos que por una razón u otra no han sido incluidos a lo largo del tiempo entre los libros sagrados canónicos del judaísmo y del cristianismo, cuyo establecimiento definitivo culminó (por lo que concierne a la Iglesia católica) en el Concilio de Trento (1546). De índole sumamente variada, narran desde vidas y episodios de los más diversos personajes de ambos testamentos hasta textos sapienciales. No pocas vece versan sobre etapas o puntos oscuros de la vida de Jesús y sus discípulos, no se pliegan a la doctrina oficial y son rechazados como «heréticos», Apócrifos del Antiguo y del Nuevo Testamento es una antología a cargo de Antonio Piñero, destacado especialista en este tema, que reúne los más sustanciales y controvertidos de ellos. La introducción, a cargo del propio Piñero, aclara de forma ejemplar la problemática que suscitan estos textos, así como el justo lugar que se les debe asignar, principalmente como elementos válidos para la historia de la teología y de las ideas religiosas, así como para la historia de la iconografía y de la literatura cristiana.
La Bhagavadgítá constituye la esencia de la sabiduría hindú. En sus páginas han encontrado refugio y consejo incontables generaciones y, desde que fue descubierto por Occidente, se ha convertido en una de las obras más importantes de la literatura universal. Humboldt, Tolstói, Huxley, Gandhi, Emerson y Thoreau, entre otros, han expresado su admiración y entusiasmo por este poema filosófico, compuesto en la India en torno al siglo II a.C. El diálogo entre Krsna y Arjuna, previo a la batalla de Kuruksetra,revela la siempre vigente lección de cómo vivir y actuar en el mundo. Ofrece pistas sobre el sentido de la vida y traza un mapa de senderos para los diversos temperamentos e inclinaciones humanas: el camino de la acción desinteresada, el del conocimiento y el de la entrega. El honor, la justicia y el destino comparten protagonismo con el amor y la amistad.
"¡Dios mío, ese grito!"
Un piolet y un grito desgarrador son los elementos que cargan de dramatismo el instante en el que Ramón Mercader acabó con la vida de Trotsky, una historia condenada a ser reconstruida mil veces, porque se ha convertido en uno de los mitos de nuestro tiempo. Pero ese momento es sólo un episodio más del fascinante devenir de la familia Mercader, narrado aquí como si de una de las grandes odiseas que caracterizan la novela moderna se tratara, y en el que no es Ramón, sino su madre Caridad, quien emerge como la figura principal de esta convulsa crónica del siglo XX.