En este texto lleno de ingenio y rigor, pero siempre accesible, Terry Eagleton, uno de los grandes teóricos de la literatura, sostiene que el arte de leer poesía está en peligro de extinción. En la actualidad, no se enseña a los estudiantes a ser sensibles al lenguaje: cómo leer un poema prestando la debida atención a su tono, aire, ritmo, textura?, no limitándose tan sólo a «lo que dice». Para demostrar cómo llevar esto a la práctica, el autor escoge un amplio abanico de poemas desde el Renacimiento hasta nuestros días y los somete a un detallado análisis, brillante y revelador. Y, de la mano de críticos pioneros como los formalistas rusos, plantea algunas preguntas clave: - ¿Qué es la poesía y en qué se diferencia de la prosa? - ¿Tiene la poesía un lenguaje propio? - ¿Qué entendemos exactamente por imágenes poéticas? Lúcido, entretenido y penetrante, Cómo leer un poema está pensado para poner fin al carácter intimidatorio que, con demasiada frecuencia, rodea a la poesía, convirtiéndola así en propiedad personal tanto del estudiante como del lector general.
Entre los siglos XV y XVIII, los europeos no solo estaban fuertemente constreñidos por las jerarquías sociales, también malvivían atormentados por el hambre y la miseria, tiranizados por el consumo diario de un pan deliberadamente adulterado, a menudo mezclado con semillas y hierbas alucinógenas.
Mientras Galileo, Descartes y Bacon trabajaban en la idea de un mundo racional y ordenada, la desnutrición crónica y la embriaguez domésticaagudizadas por estas drogas rurales y domésticas llevaban a sus coetáneos a un viaje psicodélico, a trances y explosiones dionisíacas que involucraban a pueblos enteros, a los meandros de un imaginario demoníaco y nocturno que aliviaba una existencia de otro modo invivible.
A través de una cuidadosa reconstrucción de la vida cotidiana de campesinos, mendigos y pobres, Piero Camporesi en El pan salvaje presenta una imagen vívida y desconcertante de la Europa preindustrial, azotada por el desigual reparto de bienes y alimentos, como un vasto laboratorio de sueños.
Sumida en un universo fantástico, la humanidad tenía acceso a formas de conciencia ajenas a la racionalidad, y aún podía aprovechar las reservas oníricas que la prohibición a las hierbas alucinógenas destruyó más tarde.
En este estudio ya clásico, Anthony Pagden comparó por primera vez las teorías del imperio que surgieron alrededor de las grandes potencias coloniales: española, inglesa y francesa. Desde la apología de la evangelización y la gloria militar que impulsaron al imperio español de ultramar o los argumentos económicos que esgrimieron ingleses y británicos para justificar la colonización hasta el moderno ideal cosmopolita que auguraba el fin del imperio y su remplazo por federaciones de estados iguales e independientes, Pagden hilvana magistralmente una historia de las ideas que aún hoy determinan la política y las distintas maneras en que cristaliza la identidad nacional en todo el mundo.