El 27 de agosto de 1950, el escritor piamontés Cesare Pavese se suicidó en la habitación número 49 del Hotel Roma, en Turín. Dejó una nota de disculpa, algunos poemas y un diario: El oficio de vivir. Pierre Adrian, mientras recorre con su pareja algunos lugares favoritos de Pavese, profundiza en el último verano de un escritor perseguido por la idea del suicidio. Y en toda la biografía de Pavese, en sus libros y lecturas, en sus ideas y sus amistades, Adrian ha buscado algo que nos ayude, pese a todo, a la dolorosa tarea de vivir. Pavese aparece así, a lo largo de estas páginas, como un compañero de viaje taciturno y sincero.
«Cabe imaginarse el paraíso bajo muchas formas, pero una de las más acreditadas es la de una biblioteca», sostiene el autor al comienzo de este fascinante viaje al mundo de las bibliotecas, esos espacios fértiles donde se fragua la curiosidad, el sentido crítico y la creatividad humana. Concebidas al principio como templos del saber y restringidas moradas de un saber elitista, las bibliotecas poseen en la actualidad infraestructuras concebidas para conseguir un uso público, genérico y lo más universal posible del conocimiento y de la cultura. Pero ¿es así realmente?, ¿es verdaderamente igualitario el acceso a las nuevas formas del saber?, ¿es la digitalización la nueva panacea cultural o está sencillamente abriendo las puertas al infierno de la incomunicación y la desmemoria?
Con una mirada crítica y documentada, Vian explora los desafíos históricos y actuales a los que hace frente la Iglesia católica: la reforma de la curia, el papel del dinero, las crisis de comunicación y la división interna. Este libro es una invitación a reflexionar sobre el ejercicio del poder papal y los retos que enfrenta la fe en un mundo en constante cambio.