Premio de Ensayo Gala do Libro Galego 2020. Este libro nació con el encargo de servir como introducción a la literatura para quien desee asomarse a ella. Por el camino, sin embargo, Suso de Toro se desprende del corsé del ensayo para ofrecernos la posibilidad de participar en un diálogo: con los muertos -y por sus páginas desfilan Joyce, Proust, Woolf o Rosalía de Castro-, con nosotros mismos -entrenando nuestra conciencia crítica de lectores y liberándonos de la culpa canónica: se puede no haber leído hasta el final "La montaña mágica", de Thomas Mann-, y con él, con el escritor que conoce a fondo su oficio y que reconstruye su propia carrera literaria para encontrar en sí las claves de lo que hace a quien escribe un autor: los ritos de paso, el vínculo con la propia lengua, las traiciones a que obliga el mercado, la relación con la sociedad, con la comunidad lectora viva y con la posteridad, y la alquimia que convierte en obra literaria el sustrato de lo real y lo imaginado. Al fin y al cabo, como él mismo dice, «cualquier cosa puede ser una semilla inesperada para la literatura si se da la coincidencia de que nosotros seamos la tierra apropiada».
Con un espíritu lúdico que atrapará a todo aficionado al libro y a la lectura, Alberto Manguel traza en esta deliciosa mezcla de psicología, historia, anécdotas, memoria, fantasía, estudios clásicos, etc., un estimulante recorrido por el caprichoso y apasionante laberinto de 6.000 años de palabra escrita. Lectores y experiencias de todos tiempos y lugares nos guían con amenidad a través de "Una historia de la lectura", precisamente la que Manguel ha sido capaz de articular a partir de su condición de lector ávido e inteligente: san Ambrosio, uno de los primeros en aprender a leer en silencio; Diderot, convencido de las propiedades terapéuticas de las novelas "picantes"; Borges, que pedía que leyeran para él su madre, sus amigos, quien estuviera a mano; Stevenson, que no quería aprender a leer para no privarse del placer que le producían las lecturas de su niñera...
Este volumen describe con firmeza la historia de las ideas de los precursores de la Modernidad y su lucha contra sus perseguidores. Esta contienda todavía no ha terminado y nosotros somos sus herederos.
Tras una detallada historia de las ideas del Renacimiento, este libro destila otro libro oculto de intervención política, en el que el lector encontrará un aliado intelectual contra los poderes actuales de la reacción, del servilismo, del dogmatismo y del totalitarismo.
La imagen que nuestra época elabore acerca del Renacimiento es muy importante para definir el futuro que queremos construir. Justo por ello, aquellas corrientes intelectuales y religiosas herederas del escolasticismo están muy interesadas en transmitir e imponer una idea residual del Renacimiento.
Frente a esto, el libro de Herrera define con claridad qué debe la Modernidad al verdadero precursor (el humanista y el filósofo renacentista) y qué debe la Modernidad (si le debe algo positivo) al perseguidor (la escolástica y sus poderes temporales). El perseguidor nunca fue el precursor de la Modernidad en términos de ilustración, libertad, antidogmatismo y cosmopolitismo.