Un autorretrato roto, un cuaderno del sufrimiento psíquico que describe sin ambages los síntomas e intensidades de un trastorno de ansiedad prolongado, y su oscura floración.
¿Qué queda de una persona cuando escribe «mi cabeza es mi enemiga»?
Un autorretrato roto, un cuaderno del sufrimiento psíquico o el recuento de la vida de un ex: ex adicto al trabajo, ex pareja y ex miembro del Club de los Mentalmente Sanos. Los brotes negros, que podría titularse asimismo Los buenos lagrimales, describe sin ambages los síntomas e intensidades de un trastorno de ansiedad prolongado, y su oscura floración: las fases de desesperanza, los episodios de ira, las ideaciones suicidas.
Algo más o algo menos que un individuo, lo que en sus líneas se dibuja es un sujeto experimental –«veamos si esta otra píldora hace efecto»– cuyos biorritmos, alterados hasta el colapso, somatizan la velocidad exaltada de la producción, la profesión y el capital.
Nadav Eyal, una de las voces más interesantes del panorama internacional, muestra hasta qué punto la globalización contemporánea es insostenible, y defiende que el origen del actual colapso del orden mundial proviene sobre todo del descontento hacia unas estructuras de poder que se han vuelto huecas y corruptas, o que simplemente no responden a las necesidades más urgentes de la población. Su análisis desafía de manera convincente y provocadora nuestras ideas asentadas sobre el auge de los nacionalismos y del populismo.
Revueltaes una mirada original a la creciente resistencia popular hacia la globalización y una advertencia de cómo esta resistencia puede contribuir a socavar el progreso y propiciar los movimientos identitarios. Para Eyal, el gran reto no solo está en encontrar nuevas maneras de reparar nuestro mundo globalizado, sino también en recuperar la motivación para lograrlo.
Con una maravillosa combinación de periodismo narrativo, historias personales, imágenes potentes y lúcidas reflexiones, y sin perder de vista las lecciones del pasado —desde las guerras del opio en China hasta el Haití colonial y el Plan Marshall—, Revueltamuestra una serie de sorprendentes conexiones que nos ayudan a entender las raíces profundas de nuestro malestar. Los levantamientos actuales no son un fenómeno pasajero: la revuelta es el nuevo statu quo.
Recibiendo la gracia de Dios es un conjunto de relatos de la vida cotidiana donde la presencia de Dios se hace experiencia revelada a través de la vida de la autora y su familia. Ana Ceballos es una mujer que vive atenta a los signos de los tiempos, su mirada busca la presencia de Dios en los acontecimientos sencillos del día a día; tal vez allí donde nadie le busca, ahí Ana ha podido desvelar la presencia trascendente de Dios, mostrándonos que Él se encuentra en lo aparentemente sencillo, como el acto de respirar que nos genera la vida, como en momentos inexplicables de nuestra realidad... Un total de 30 anécdotas que muestran la presencia de Dios en la vida de una mujer sencilla, hospitalaria, atenta a las señales de los tiempos, solidaria y compasiva, madre y esposa.