Entre los siglos XVy XVII, Europa asistió a la construcción de una civilización escrita gracias sobre todo al progresivo afianzamiento de la escritura como medio de difusión del conocimiento. Para seguir la progresiva implantación de una civilización escrita en Europa se ha elegido lo que se podría llamar una historia natural del libro y del autor, exponiendo los distintos pasos que había que recorrer desde que se aprendía a leer y a escribir en la infancia hasta que las obras ya concluidas eran leídas por el público y colocadas en los anaqueles de sus bibliotecas, consideradas aquí ejemplos de una específica manera de ordenar el saber.
En esta ya clásica obra de historia cultural, el insigne historiador Fernando Bouza analiza las formas que la cultura escrita adoptó en su devenir histórico en la alta Edad Moderna.
Don Quijote de la Mancha es uno de los personajes más célebres de la historia de la literatura. Desde que se presentó por primera vez al público hace más de cuatrocientos años, ha cabalgado y protagonizado novelas profanas, ensayos, obras teatrales, películas y todo tipo de homenajes. Gracias a ello, sus aventuras y su locura se han convertido con el tiempo en símbolos del triunfo de la imaginación. Pero ¿y si no todo ello fuera imaginado?
Javier Escudero lleva más de veinte años dedicados a la investigación de la obra de Cervantes y a los documentos públicos y privados de su época. Gracias a ello, ha podido descubrir que hubo otros hidalgos de «lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor» y que incluso alguno de ellos se enfrentó a los molinos de viento. En este libro, nos adentramos en esa Mancha de la que no queremos acordarnos y que poco tiene de inventada para dar respuesta a la pregunta: ¿quién fue realmente don Quijote?
En esta recopilación de viñetas publicadas en The Guardian entre 2002 y 2005, Posy Simmonds afila su pluma y su ingenio para hacer un retrato despiadado del mundillo literario. Con su extraordinario don para observar y parodiar, repasa con humor los rasgos característicos de quienes hacen de la literatura su forma de vida. Escritoras que sufren de «bloqueo rural» cuando se mudan al campo y entonces se dedican a teclear sus fantasías sexuales en un ordenador portátil, haciendo malabares con los dilemas del feminismo y la maternidad; autores que padecen de «egotitis aguda» cuando entran en contacto con su público durante las firmas de ejemplares, se quejan de los críticos y deploran tener que «pasar por el aro de los medios»; pequeños libreros que luchan por sobrevivir y que deben lidiar con clientes recalcitrantes y comerciales que intentan colocarles el último libro de una gran celebridad: nadie se libra de recibir su merecido... con cariño, eso sí.