sta es la edición definitiva del célebreDiariode Anne Frank. Su texto amplía en una cuarta parte las ediciones anteriores y ofrece una visión completa y fidedigna de la terrible odisea vivida durante la Segunda Guerra Mundial por la familia Frank
Un testimonio único sobre el horror y la barbarie nazi, y sobre los sentimientos y experiencias que vivió una niña judía recluida con su familia para huir del Holocausto
Tras la invasión de Holanda, los Frank, comerciantes judíos alemanes emigrados a Amsterdam en 1933, se ocultaron de la Gestapo en una buhardilla anexa al edificio donde el padre de Anne tenía sus oficinas. Eran ocho personas y permanecieron recluidas desde junio de 1942 hasta agosto de 1944, fecha en que fueron detenidas y enviadas a campos de concentración. En ese lugar y en las más precarias condiciones, Anne, a la sazón una niña de trece años, escribió su estremecedorDiario: un testimonio único en su género sobre el horror y la barbarie nazi, y sobre los sentimientos y experiencias de la propia Anne y sus acompañantes. Anne murió en el campo de Bergen-Belsen en marzo de 1945.
De enero de 1912 a mayo de 1915, Arnold Schönberg llevó un diario―el único del que se tiene constancia―en el que anotó sus vivencias, sentimientos y reflexiones. A pesar de su brevedad, se trata de un documento de enorme interés, pues nos brinda una instantánea de su vida en Berlín en un momento trascendental de su carrera, mientras componía Pierrot lunaire. El presente volumen incluye además el texto con el que presentó su ópera cómica De hoy a mañana en una emisión radiofónica de la Funk-Stunde Berlin. Asimismo, Josef Rufer, discípulo y estrecho colaborador de Schönberg, ofrece a modo de homenaje un ensayo en agradecimiento a lo que vivió y aprendió del maestro desde 1919, cuando lo conoció, hasta su muerte.
Diario de Berlín es un clásico, la mejor crónica de la Europa de entreguerras, un libro que sigue siendo de lectura obligada para conocer el período más oscuro y fascinante del siglo XX.
Publicado por vez primera en 1941, la clarividencia, la pasión y la tensión de Diario de Berlín encontraron un público ávido de información y lo convirtieron de inmediato en un texto de referencia sobre el torrente de acontecimientos que se sucedían en Europa.
La férrea censura de los nazis obligó a Shirer, corresponsal en Berlín de la CBS, a reservar lo mejor de su lucidez e inteligencia para su diario personal. Sus extraordinarias anotaciones constituyen la crónica periodística que no pudo transmitir. Iluminado por un profundo conocimiento de la vida alemana y europea de la época y la comprensión de las corrientes más profundas de la política internacional, en sus páginas presenciamos el arrogante avance del Tercer Reich y la imparable marcha de Europa hacia la guerra.
Diario de Berlín demuestra que el periodismo a veces no solo es el primer borrador de la historia, sino su mejor versión.