Qué significa ser obediente a la naturaleza humana y al objetivo de la sociedad, y desobediente a todo tipo de ideales e ideologías políticas: he aquí el problema central de este conjunto de ensayos, reunidos por el autor poco tiempo antes de su muerte, en 1980, un manifiesto personal que sintetiza las ideas fundamentales de uno de los más importantes psicólogos y sociólogos del siglo XX. Fromm expone aquí su concepción de los requerimientos básicos para una vida humana plenamente realizada (necesidades de relación, de enraizamiento, de trascendencia y de identidad), y critica las estructuras sociales que obstaculizan su cumplimiento. Describe cómo las naciones técnicamente avanzadas han logrado un nuevo tipo de individuo -el homo consumens, un hombre consagrado a la posesión y al consumo, pero solitario, aburrido y ansioso: un hombre-organización peligrosamente obediente-y afirma que tanto el capitalismo como el comunismo totalitario se mueven hacia una burocracia industrial negadora de la vida, el primero por ignorar, y el otro por traicionar, los ideales de un socialismo auténticamente humanista en el cual los individuos prevalezcan sobre las cosas, la vida sobre la propiedad y el trabajo sobre el capital.
En este libro se recogen las conversaciones que, durante más de veinticinco años, ha mantenido el Dalai Lama con uno de sus más queridos discípulos. En ellas Su Santidad muestra todas sus facetas: mentor personal, maestro en lo divino, líder terrenal, embajador del Tíbet, filósofo abierto al mundo, hombre versado en la sabiduría milenaria del budismo, experto en meditación... y también optimista incorregible. El carisma del Dalai Lama y la profunda empatía que siente por la curiosidad de su alumno ofrecen una valiosísima lección sobre cómo podemos encontrar la verdadera felicidad en nuestras vidas.
Sobre la fotografía, publicado por primera vez en 1973, supuso un trabajo revolucionario en la crítica fotográfica. Con él, Susan Sontag planteó cuestiones ineludibles, en el plano moral y estético, acerca de esta forma artística. Hay fotografías en todas partes; tienen la potesta de impactar, idealizar o seducir, pueden provocar la nostalgia o pueden servir de recordatorio, y se erigen en prueba contra nosotros o en el medio para identificarnos. En estos seis penetrantes capítulos, Sontag se pregunta cómo afecta la omnipresencia de estas imágenes a nuestro modo de ver el mundo, y cómo hemos llegado a depender de ellas para confeccionar las nociones de realidad y autoridad.
Paolo Virno constata lo evidente: las formas de vida contemporáneas están marcadas por la impotencia. Sea que esté en juego un amor sin igual o la lucha contra el trabajo precario, una parálisis frenética aprisiona la acción y el discurso.
No se logra hacer aquello que conviene y se desea, y al mismo tiempo no somos capaces de sufrir de manera apropiada los golpes a los que estamos sometidos. Pero allí donde parece haber una falta, el filósofo italiano encuentra un exceso de competencias y habilidades. Saboreamos la potencia, pero no la podemos volver acto; situación que genera todo un catálogo de pasiones tristes: arrogancia manchada de abatimiento, timidez descarada, alegría por los naufragios, resignación beligerante, solidaridad refunfuñante.
¿Cómo conjurar colectivamente esta parálisis ansiosa que coloniza la acción y el discurso al punto que inhibe hasta la capacidad de padecer? ¿Mediante qué hábitos e instituciones comunes es posible escapar del agotador estado de impotencia crónica, de la disposición taquicárdica y precarizante a estar «siempre listos»?
Pocos males afectan tanto al ser humano como la ira, que daña al agredido y al colérico, y que es capaz de extenderse como una plaga. Este es uno de los mensajes que supo transmitirnos Séneca en sus diálogos. El filósofo expone, también, de forma clara cómo vivir con serenidad y calma ante circunstancias adversas, para lograr la tranquilidad del alma y apartar la ansiedad. Sus argumentos nos resultan hoy de tremenda actualidad cuando los vemos coincidir con los de quienes nos aconsejan sobre el bienestar personal. Sus palabras, a la vez, nos sumergen en el quehacer cotidiano de la Roma antigua. Todo un lujo.
«La cólera hiere a todos, pero no todos se sienten heridos por lo mismo. Conoce tu debilidad y podrás proteger te mejor de la ira.»
Maggie Nelson nos propone un replanteamiento de la libertad basado más en el respeto a los demás que en una idea maximalista o abstracta.
En esta época en que los sectores más reaccionarios de la sociedad hacen bandera de un concepto sesgado de la libertad, distorsionando, manipulando y apropiándose de su significado, parece indicado aplicar una estricta crítica del lenguaje y descubrir que, en el fondo, sean cuales sean las confusiones que provoca hablar de la libertad, esencialmente no difieren de los malentendidos a los que nos arriesgamos al hablar de cualquier otra cosa. Este es el tema básico de este libro, que se aleja de cualquier elucubración metafísica para proponer una filosofía «práctica», en la que el peso de la actualidad no impide la reflexión ni la lucidez, sino que aporta una luz que arranca esa palabra de cualquier supuesto o idea recibida.
La polifacética Maggie Nelson nos propone un replanteamiento del concepto de libertad desde la óptica de las cuestiones más acuciantes del momento, como la pandemia, el debate en torno al consentimiento sexual o el cambio climático, la discriminación racial, la droga como elemento que puede liberarnos o esclavizarnos (a veces al mismo tiempo) o el papel del artista a la hora de crear de manera «responsable». Centrándose en la dialéctica entre libertad y restricción, en este volumen de género fluido confluyen la filosofía, la sociología, la crítica de arte y la reivindicación de una libertad sexual no agresiva y carente de género y etiquetas.