Con un ardiente beso, los muros que separaban a Alizeh, la heredera perdida del antiguo reino de los jinn, y a Kamran, el príncipe heredero al trono arduniano, se han desmoronado. Al igual que sus respectivas vidas.
El abuelo de Kamran, rey de Ardunia, ha muerto y su terrible pacto secreto con el diablo ha salido a la luz. Cyrus, el misterioso noble de cabellos cobrizos, ha secuestrado a Alizeh y la ha llevado al reino vecino de Tulán, donde él es el rey. Cyrus también ha hecho un pacto con el diablo, que obligará a Alizeh a traicionar sus sentimientos por Kamran para reclamar su posición como reina de los jinn.
Alizeh no quiere tener nada que ver con Cyrus ni con su trato con Iblís. Pero, estando atrapada en Tulán y tentada por la promesa de cumplir su destino como heredera al trono, se ve obligada a considerar la posibilidad de dejar a un lado sus sentimientos y convertirse, por fin, en la reina que su pueblo necesita.
Mientras tanto, Kamran trata de recomponer su imperio, ahora dividido. Frente a todo un aluvión de traiciones, lo único que tiene por seguro es que debe viajar a Tulán para vengar a su abuelo. Confía en que Alizeh lo esté esperando allí. y que no se haya convertido todavía en la reina del monarca tulaní.
Mentiras y más mentiras.
Una isla privada.
Una ilustre y conocida familia de Nueva Inglaterra.
Un grupo de cuatro amigos -los Mentirosos- cuya amistad se vuelve destructiva.
Una rebelión. Un accidente. Un secreto.
Mentiras y más mentiras.
Amor verdadero.
Y, por fin, la verdad.
CLAY
Las chicas Marymount somos buenas chicas. Castas, puras, casi inalcanzables, y lo importante no es serlo sino parecerlo. Yo no soy la excepción, sé portarme bien, con mi uniforme planchado, mi cuerpo erguido; de lunes a viernes soy la dueña del instituto y los domingos… una buena niña católica.
Esa soy yo, siempre tengo el control. No puedo confesar lo que realmente quiero, he de ocultarlo, cada día, cada hora, luchar contra el deseo constante de meter mi mano bajo su falda. Porque todos interpretamos un papel, y el mío es ser perfecta.
OLIVIA
Todos los días pongo rumbo al colegio Marymount con una motivación: graduarme y entrar en la universidad. No me avergüenzo ni de mi familia ni de mis orígenes, aunque todos en la escuela se dediquen a cuchichear sobre el largo de mi falda o el rojo de mis labios.
Ellos siempre me han despreciado y creen que no voy a defenderme. Se equivocan. Lo haré cuando esté a solas con ella y le demuestre que no hace falta que sea un chico quien la toque para dejar aflorar todo lo que esconde con tanto esfuerzo.
You’d think being abducted by aliens would be the worst thing that could happen to me. And you’d be wrong. Because now the aliens are having ship trouble, and they’ve left their cargo of human women—including me—on an ice planet.
We’re not equipped for life in this desolate winter wasteland. Since I’m the unofficial leader, I head out into the snow to look for help.
I find help all right. A big blue horned alien introduces himself in a rather . . . startling way. Vektal says that I'm his mate, his chosen female—and that the reason his chest is purring is because of my presence. He’ll help me and my people survive, but this poses a new problem.
If Vektal helps us survive, I’m not sure he’s going to want to let me go.
Una novela íntima y sensible sobre la pérdida, el amor y los caminos que nos pueden ayudar a reencontrarnos con nosotros mismos.
Lolo ya no está, y es un dolor que Ana no logra poner en palabras. Como una forma de abrazarse, dibuja en su libreta y esboza poemas al ritmo de la música que suena en sus auriculares. Una fuerza desconocida la empuja hacia adelante, a pesar de todo. Pero los recuerdos la siguen despertando por las noches y durante el día se encuentra soñando con volver a ver esos ojos enormes. Hasta que una puerta se abre, y del otro lado el corazón de Ana vuelve a latir. Una novela íntima y sensible sobre la pérdida, el amor y los caminos que nos pueden ayudar a reencontrarnos con nosotros mismos.
Una flor blanca puede ser el final o el principio de todo.
Mi nombre es Luke y mi vida dio un giro en el momento más inesperado.
Perdí todo lo que tenía y los días pasaron a ser un eterno bucle en el que sentía que me faltaba algo. Una razón por la que sonreír. Intenté sobrevivir, seguir hacia delante, pero era complicado cuando ni siquiera era capaz de encontrar lo más importante: a mí mismo.