Mi vida estaba compuesta de brillantes mentiras, pero de la decadencia surgió la muerte. Y como un fénix llameante, ahora debo alzarme de entre mis cenizas y aprender a utilizar mi poder. Porque ya no estoy en ninguna jaula y soy libre de escapar del reino helado en el que me han mantenido presa.
Sin embargo, el mundo no me lo permite. Es lo que sucede cuando te opones a un monarca: su gente se opone a ti.
Por fortuna, tengo a otro rey de mi lado. No obstante, incluso con el temible Slade Ravinger apoyándome, los otros regentes están decididos a acabar conmigo. De modo que lucharé por él, y él matará por mí...
Abbey Bly se va a estudiar a Londres durante un año: la oportunidad perfecta para escapar de su padre, una vieja estrella del rock, muy cariñoso pero algo sobreprotector. Abbey está preparada para ser libre y descubrirse a sí misma. Pero, cuando llega a su nuevo piso, se encuentra con que sus compañeros no son las chicas encantadoras que tenía en mente, si no una panda de chicos carismáticos, divertidos e injustamente atractivos. Sobre todo, porque tienen una regla: no liarse entre compañeros de piso.
Abbey, que nunca se vio como una rebelde, empieza a mentirle a su padre, se enamora de dos chicos a los que no puede tener y, para colmo, se ve enmarañada en un escándalo con una familia de alta sociedad.
Si Abbey quiere encontrar el amor, respuestas o un futuro en Londres, tendrá que decidir qué reglas y qué corazones merece la pena romper.
Una reinvención de los mitos griegos que teje con épica maestría mentiras, amor y tragedia
Cada primavera, Ítaca condena a doce muchachas a la soga. Es el precio que el vengativo Poseidón exige por las vidas de las doce doncellas de la reina Penélope que, hace siglos, fueron colgadas y arrojadas a las profundidades.
Pero cuando el destino le llega a Leto, la muerte resulta no ser lo que ella esperaba. Tras su asesinato, despierta en una isla misteriosa donde conoce a una chica de ojos verdes con el poder de gobernar los mares. Se llama Melanto, es dulce, misteriosa y preciosa... y dice que, para acabar con la maldición de Poseidón, Leto debe a asesinar al príncipe de Ítaca.
A pesar del peligro, ella está más que dispuesta a cumplir su misión.Por desgracia, el príncipe Matías resulta mucho más difícil de odiar de lo que Leto y Melanto esperaban...
Una historia llena de segundas oportunidades.
Continúa el hilo que une a Nina, Scott y su amor… ¿imposible?
Scott sabe lo que debe hacer: si quiere proteger a Nina, debe abandonar su sueño de tener un futuro con ella. Su trabajo, su estilo de vida y su familia ponen en peligro a la persona que más quiere. Por eso, decide que debe alejarla de todo. Por eso, decide mentirle de nuevo. Nina no tiene ni idea de lo que ha ocurrido, pero está segura de que Scott está mintiendo. Sea lo que sea, su corazón le dice que crea en sus acciones, y no en sus palabras. La historia se repite, y ella no está dispuesta a volver a perder al amor de su vida. Cuando el pasado regresa para separarlos, Nina y Scott deberán hacerle frente a la distancia y al miedo para coger las riendas de sus vidas y decidir su futuro. Pese a los peligros. Juntos.
El esperadísimo final de la trilogía Seremos Imperfectos, Una perfecta despedida, de la sensación española de Wattpad, Andrea Smith
¿Será este el adiós para siempre?
Olivia y Jax son amigos. Pero, ¿solo amigos?
Porque donde hubo fuego… cenizas quedan. Y las suyas todavía siguen ardiendo.
Cuando deciden iniciar un viaje juntos en caravana por el sur de Europa, saben que se enfrentaran a tantas aventuras como problemas.
Un último viaje. Una última oportunidad. Una perfecta despedida.
Y pensar… que todo comenzó con una perfecta equivocación.
¿Qué harías si la única forma de conseguir tu objetivo fuera aliarte con el chico más insoportable... y más guapo del instituto?
Hay una cosa que Athalia Pressley desea sobre todas las demás: el afecto de su hermano gemelo. Desde la muerte de sus padres, Henry no se lo demuestra nunca… Hasta que, por culpa de una asignatura casi suspendida y la obligación de asistir a clases particulares, Athalia acaba en manos del enemigo de su hermano.
De repente, Athalia consigue la atención de Henry, y, si quiere que las cosas sigan siendo así, necesita a Dylan McCarthy Williams. El rival de su hermano no le cae muy bien, y no le gustan ni sus comentarios mordaces ni su actitud de sabelotodo. Ni tampoco su pelo alborotado, ni sus ojos de ensueño, ni ese cuerpo de jugador de fútbol… Sin embargo, a base de citas falsas y risas forzadas, parece que ambos consiguen dejar atrás sus diferencias para lograr un objetivo común: que uno de los Pressley les haga caso.