Él quiere salvarla y ella, desaparecer. El destino los ha juntado y el amor los unirá.
Cueste lo que cueste para los dos. Johnny Kavanagh lo tiene todo a su favor. En la cancha de rugby es una bestia, incluso con la terrible lesión que oculta. Todo el mundo sabe que llegará a lo más alto, pero para ello no puede permitirse distracciones. Ni siquiera con la tímida chica nueva de Tommen College. Para Shannon Lynch, en cambio, la vida nunca ha sido fácil. Acosada y atormentada, llega a Tommen College a mitad de curso en busca de un nuevo comienzo. Pero cuando, en su primer día de clase, conoce al famoso Johnny Kavanagh, ve peligrar seriamente su intención de pasar desapercibida. A medida que traban una complicada amistad, en la que deberán hacer frente a la indiscutible química que hay entre los dos, un escabroso secreto amenazará con echarlo todo a perder. Pero Johnny no abandonará a Shannon.
Las cadenas del rey es la segunda parte de la Saga Rey. El amor destruye tanto como la guerra. Después de enfrentarse a quienes buscaban silenciar su voz y a las intrigas de Mishnock, Emily termina como prisionera de quien creía que era el amor de su vida. Ahora, lejos de su familia y atrapada en un territorio desconocido, se ha convertido en la clave de los acuerdos de paz entre los dos reinos enemigos y su corazón empieza a debatirse entre dos mundos irreconciliables. En medio de la opulencia de la corte y las sombras de la traición, y mientras el destino de los reinos pende de un hilo, Emily se arriesgará a vivir un romance que la obligará a desafiar sus convicciones. ¿Podrá entregarse a la pasión con el hombre al que le han enseñado a odiar sin poner en riesgo su libertad y sus ideales? En la segunda parte de El perfume del rey, que se ha convertido en un éxito de ventas en toda América Latina, nos sumergimos en un universo donde el amor y la lealtad se enfrentan en un escenario de peligros políticos y sentimientos prohibidos.
Enamorarse fue fácil.
Lo que viene después es el verdadero desafío...
Tras una devastadora lesión que lo ha mandado al banquillo, Johnny Kavanagh se aferra como puede a sus sueños. Perdido, inseguro y necesitado de consuelo, decide desentrañar los misterios que envuelven a la chica de ojos azules en la que no puede dejar de pensar ni un minuto.
Guardar un secreto nunca ha sido un problema para Shannon Lynch. Sabe bien que los demonios y los villanos no solo acechan en los cuentos, sino también en el mundo real. Traumatizada tras volver de Dublín y desesperada por proteger a sus hermanos pequeños, Shannon acaba participando en la misma pantomima de siempre mientras su futuro se desmorona frente a sus ojos. La única forma de protegerse es levantar un muro a su alrededor.
Solo un chico será capaz de saltar ese muro, el mismo que le ha robado el corazón. Sin embargo, están a punto de salir a la luz secretos que cambiarán sus vidas para siempre.
¿Sobrevivirá a todo ello el amor entre Johnny y Shannon?
RYAN
Soy el nuevo capitán de los Devils, el equipo de la NBA de Chicago, y lo último que necesitaba este año era que Indy Ivers, la mejor amiga de mi hermana, se mudara a mi apartamento. Es desordenada, histérica y demasiado tentadora.
Pero cuando el director del equipo expresa su desaprobación por mi ascenso a capitán, refiriéndose a mí como un lobo solitario sin equilibrio entre la vida laboral y personal, no se me ocurre mejor manera de convencerle de lo contrario que fingir que salgo con mi simpatiquísima compañera de piso.
Tener una novia falsa no tenía por qué ser complicado, pero tener a Indy bajo mi techo y en mi cama es complicado, sobre todo cuando quiere también la parte romántica que yo nunca podría darle.
INDY
Nunca imaginé que viviría con el hermano de mi mejor amiga, la superestrella de la NBA Ryan Shay. ¿Más increíble aún? Me necesita para que actúe como su novia, amantísima y cariñosa, que de repente lo ha convertido en un tipo simpático y accesible.
Porque, bueno... no lo es. Es un obseso de su espacio personal y no confía en los demás.
Pero nuestro acuerdo no es unilateral. Tengo una boda dentro de poco, a la que asistirán todos mis amigos de la infancia, incluido mi exnovio, y no hay mejor venganza que ir acompañada del héroe de mi ex.
Sin embargo, a veces se me hace imposible separar lo real de lo falso. Enamorarme de mi compañero de piso nunca formó parte del trato, sobre todo cuando Ryan no hace más que recordarme que no cree en el amor.
Lowen Ashleigh recibe un encargo que le cambiará la vida: Jeremy, el flamante marido de Verity Crawford, una de las autoras más importantes del momento, la contrata para terminar la serie de libros en la que trabajaba su mujer antes de sufrir un grave accidente que la ha dejado en coma. Cuando Lowen se instala en la mansión del matrimonio para poder trabajar con los materiales de Verity, descubre una autobiografía escondida en la que Verity hace confesiones escalofriantes. Lowen decide ocultarle el manuscrito a Jeremy, pero a medida que sus sentimientos por él comienzan a intensificarse, se da cuenta que ella podría beneficiarse si Jeremy leyera las palabras de su mujer.
Los Hematoi nacen de la unión entre mortales y dioses.
Los puros, hijos de dos Hematoi, poseen poderes divinos.
Pero los mestizos, fruto de la unión entre Hematoi y humanos, no corren la misma suerte.
Solo tienen dos opciones: ser entrenados como Centinelas para cazar y matar daimons o convertirse en criados al servicio de los puros.
Alexandria es mestiza y preferiría arriesgar su vida luchando que desperdiciarla limpiando inodoros, aunque, de todos modos, puede terminar viviendo como los pobres. Hay varias reglas que los estudiantes del Covenant, la academia donde se entrena a los Centinelas, deben seguir. Alex tiene serios problemas con todas ellas, especialmente con la más importante: las relaciones entre puros y mestizos están prohibidas.
Desafortunadamente, ella está enamorada de Aiden, un apuesto sangre pura. Pero ese no es su mayor problema: mantenerse convida el tiempo suficiente para graduarse en el Covenant y convertirse en Centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrenta a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: convertirse en un daimon y ser perseguida por Aiden. Y eso sería horrible.