Nuestra vida es un viaje, una aventura extraordinaria. Aunque, a menudo, es más bien como el ascenso a la cumbre de la montaña más alta del mundo. Tu viaje vital es tuyo y personal. De ti depende llegar a saber quién eres, adónde quieres ir y con quién. Como en todo viaje, también en la vida hay subidas y bajadas, caídas y tropiezos, cansancio y dolor. Pero si no das el primer paso, te quedarás a medias en tu recorrido vital. Será entonces cuando muchas personas se acercarán a ti, para lamentar contigo el no haber tomado la decisión a tiempo. La vida te da una oportunidad, no suele darte dos. El ascenso a tu Everest personal requiere preparación, determinación y valentía. No debe emprenderse de manera frívola, sino siendo consciente del riesgo que entraña tal aventura. Este libro puede ser tu guía que te ayude a soltar lastre durante la escalada.
La doctora Electa Navarrete lleva años guiando a pacientes física y mentalmente para reconocerse en su mejor versión. En estas páginas, nos aconseja que, para llegar a la cima, primero debes conocerte a ti mismo.
Con el humor y patosismo de El diario de Bridget Jones y el ingenio sarcástico de Sexo en Nueva York, el primer libro de Gigi Vives gira en torno a deslices amorosos y desilusiones románticas basados en hechos reales. Una prosa maravillosa que cuenta historias agridulces y que desvela la realidad del dating en el siglo XXI.
Una narrativa divertida y original que expone sin contemplaciones esa búsqueda constante y frustrante de la pareja ideal.
Las promesas del alma tienen como fin la liberación y la sanación espiritual. Las 12 promesas te ayudarán a: Soltar las cargas y entregar a Dios - Liberarte de la culpa - Perdonar y dejar ir • Discernir el plan personal de tu alma - Reafirmar tu espiritualidad - Vencer el miedo - Redescubrir tu ser auténtico Hacemos promesas desde que tenemos uso de razón –a nuestros padres, a nuestra pareja, a nuestros amigos, a nuestros maestros, a nuestro país– y muchas de ellas tienen su razón de ser, pero existen muchas otras promesas que no son tan obvias ni tan correctas, como cuando interiormente prometemos alejarnos de nuestra verdad y propósito, para conseguir la aprobación de los demás.