Crear tu concepto de amor, romper con los mitos románticos, definir tus límites y ser tu propio lugar seguro son algunas de las herramientas para empezar a desaprender todo lo que nos han contado sobre las relaciones y reconstruirlas de forma sana, contigo misma y con los demás.
Para, respira y tómate el tiempo de conocerte y aceptarte, y empieza a quererte bien para querer mejor.
¿Qué pasaría si llorar no fuera simplemente una respuesta emocional, sino un acto de empoderamiento? A lo largo de la historia, el llanto ha sido interpretado de distintas maneras: desde señal de gratitud en la civilización azteca hasta herramienta de calma de los espíritus en la antigua China. Para los griegos era erótico, mientras que en la Edad Media se le atribuían propiedades curativas contra las infecciones. Llorar es mucho más que una reacción involuntaria cuando nos sentimos tristes: es una fuente de poder y una de nuestras más bellas formas de expresión.
Hay que acabar, de una vez por todas, con esa idea de que cumplir años es lo peor de lo peor: una maldición. No lo es. Y romper el silencio y hablar de ello, también de la menopausia —algo natural y temporal, ¡no una condena de por vida!—, es fundamental. Superar los 45 y transitar los 50 conlleva inevitablemente mudar de piel. Y eso asusta. Sin embargo, si te adentras sin reparos en lo que a ratos puede semejar un terreno de arenas movedizas, descubrirás que este desafío tiene premio, porque… Ha llegado tu momento. Ahora te toca a ti.
Cada mujer es única. Tú lo eres. Por lo tanto, tu cambio es tuyo. Y de eso va este libro, cuyo objetivo es desmontar las falsas creencias en torno a la madurez, animarte a enfocar en lo positivo —que es mucho, aunque apenas se hable de ello— e incitarte a hacer los reajustes necesarios para disfrutar de tu vida... ¡sin rendir cuentas! No lo dudes: vas a ganar, no a perder.