Estás a punto de aprender la lección más importante de tu vida. Todos hemos conocido a alguien mayor y más sabio que nos inspiró cuando éramos jóvenes y nos ayudó a ver el mundo de un modo más profundo. Para Mitch Albom, esa persona fue su profesor de la universidad, Morrie Schwartz. Con el tiempo le perdió la pista, pero la casualidad quiso que pudieran retomar el contacto cuando a Morrie, que padecía ELA, le quedaba poco tiempo de vida. Desde entonces lo visitó cada martes para hablar con él de temas eternos y universales, y para recuperar la curiosidad y la fascinación por un mundo que, con el paso del tiempo, se había vuelto frío y descolorido. Un testimonio extraordinario que ayuda a dar sentido a nuestra vida.
Uniendo el punto de vista científico, psicológico y humano, la autora nos ofrece una reflexión profunda, salpicada de útiles consejos y con vocación eminentemente didáctica, acerca de la aplicación de nuestras propias capacidades al empeño de procurarnos una existencia plena y feliz: conocer y optimizar determinadas zonas del cerebro, fijar metas y objetivos en la vida, ejercitar la voluntad, poner en marcha la inteligencia emocional, desarrollar la asertividad, evitar el exceso de autocrítica y autoexigencia, reivindicar el papel del optimismo.
Todos experimentamos pensamientos que se repiten de manera constante en nuestra mente. Sin darnos cuenta, nos vemos atrapados en un ciclo interminable de ideas que se niegan a liberarnos. A pesar de nuestros esfuerzos, nos sentimos condenados a dar vueltas sin cesar.
La buena noticia es que, aunque este laberinto pueda parecer intrincado y sin fin, existe una salida. Este libro te invita a preguntarte: ¿Qué pensamientos tóxicos tengo? ¿Por cuáles podría reemplazarlos?