«Soy el comienzo de una consciencia totalmente nueva.» Estas palabras de Osho ponen de manifiesto hasta qué punto él concibe su filosofía como una ruptura con las distintas tradiciones del pensamiento occidental y oriental. Es el mismo espíritu con el que aborda la sexualidad: en primer lugar, presentándola no como un obstáculo para la elevación espiritual e incluso la iluminación sino, al contrario, como un regalo, expresión de unas energías biológicas y puerta al autoconocimiento; en segundo lugar, como realización del amor, elemento central de la existencia. El sexo es uno de los aspectos constitutivos del nuevo tipo de santo, Zorba el Buda, fusión inseparable de lo terreno y lo sublime. A partir de estos principios, Osho responde a las distintas cuestiones que plantea la sexualidad, desde la eyaculación precoz hasta el orgasmo, desde los celos hasta la diferencia entre sexos. La visión del sexo de Osho es, desde luego, enormemente crítica respecto a lo que enseñan muchas religiones, que la calificarían de pecaminosa, e incluso la moral dominante. Pero justamente es su audacia, junto a la alta calidad espiritual de su reflexión, lo que hace tan atractivo su pensamiento.
El mundo cambia a una velocidad vertiginosa. Es imposible adivinar cómo viviremos en el futuro. Lo único que sabemos es que hará falta mucha imaginación y creatividad para transformarnos y enfrentarnos a los nuevos retos. El Elemento es el punto en el que el talento innato se une con la pasión personal. Descubrirlo nos llev a a recuperar capacidades sorprendentes en nuestro interior. Desarrollarlo dará un giro radical a nuestro entorno laboral, a nuestras relaciones y, en definitiva, a nuestras vidas.
En las páginas de este libro, los padres aprenderán a comunicarse con sus hijos en el nivel más profundo y gratificante, y a ayudarles a salvar con éxito el intrincado laberinto de las relaciones con los demás. Tomando los cinco principios básicos del gran éxito de Daniel Goleman, Inteligencia emocional, los autores explican cómo aplicarlos para obtener buenos resultados en la educación de los niños. Con este fin ofrecen sugerencias, actividades y consejos prácticos, que ayudarán a los padres a utilizar sus emociones del modo más positivo en asuntos tan cotidianos como la rivalidad entre hermanos, conflictos con los amigos, situaciones escolares diversas o la presión ejercida por los compañeros.
Tanto en nuestra vida profesional como en la social o familiar, todos nosotros tenemos constante necesidad de relacionarnos con otras personas. Unas relaciones que a veces se convierten en una tortura: cuando sentimos que manipulan nuestra voluntad para plegarla a sus proyectos... y, aun sabiéndolo, somos incapaces de negarnos. A partir de técnicas conductistas, Cuando digo no, me siento culpable ofrece un método fácil y de excelentes resultados para afirmar los propios derechos y aspiraciones sin necesidad de manipular los ajenos, y sin tener las frustrantes reacciones defensivas que, a veces con incomodidad, experimentamos.
Cautelosa y conservadora, Molly Driscoll sigue trabajando en el mismo hospital de la costa de Jersey en el que completó su formación como enfermera. Cuando a su ahora ex marido, Jason, se le diagnostica un cáncer, Molly intenta convencerlo de que se someta a una quimioterapia.
A pesar de sus problemas en el pasado, Molly se ofrece para hacer algo igualmente sobrecogedor a cambio de que Jason acepte someterse al tratamiento.
Abandona el trabajo, cambia su Honda Civic por una motocicleta Eiarley Davidson y se convierte en «enfermera itinerante». Sus misiones la llevarán a descubrir las espectaculares tormentas y los bares de moteros de Nueva Inglaterra, la serena belleza y los billares llenos de humo de Carolina del Sur, y el ajetreo febril de un centro de atención en Cayo Hueso. A lo largo del camino, Molly se enfrentará a difíciles pruebas, topará con un posible acosador y conocerá a un compañero muy peculiar. Ralph es, como ella, un enfermero itinerante y un fan de la moto americana por excelencia. Pero, además, asegura ser un ángel.
La autora de Dios vuelve en una Harley nos sorprende con una nueva aventura que dejará huella en el corazón de los lectores.
Tras el éxito fulgurante de Inteligencia emocional, un fenómeno editorial con más de 5 millones de ejemplares vendidos en todo el mundo, Daniel Goleman emprende ahora una revolucionaria síntesis de los últimos descubrimientos en biología y ciencias del cerebro. Inteligencia social revela que estamos “programados para conectar” con los demás y que nuestras relaciones tienen un impacto muy profundo en nuestras vidas. El trato diario con nuestros progenitores, parejas, jefes, amigos, e incluso extraños, conforma nuestro cerebro y afecta a todas las células de nuestro cuerpo hasta el nivel de los genes. El hallazgo fundamental que Goleman aporta, con su habitual amenidad y rigor, es que estamos diseñados para ser sociables, y que participamos constantemente en un “ballet neuronal” que nos conecta, de cerebro a cerebro, con quienes nos rodean. Las relaciones interpersonales poseen un impacto biológico de largo alcance porque afectan a las hormonas que regulan tanto nuestro corazón como nuestro sistema inmunológico, de modo que las buenas relaciones actúan como vitaminas, y las malas, como venenos. Goleman explica la sorprendente fiabilidad de nuestras primeras impresiones, explora el carisma, afronta la complejidad de la atracción sexual; describe también “el lado oscuro” de la inteligencia social, desde el narcisismo al maquiavelismo y la psicopatía. ¿Existe una manera de educar a nuestros hijos para que sean felices? ¿Cuál es la base de un matrimonio creativo? ¿Cómo pueden los empresarios y los maestros instruir a quienes les siguen? ¿Cómo lograr que grupos divididos por prejuicios y odios lleguen a vivir en paz? El autor comparte sus investigaciones con una gran convicción: los humanos tenemos una predisposición natural para la empatía, la cooperación y el altruismo. Lo único que necesitamos es desarrollar la inteligencia social.