Tanto en nuestra vida profesional como en la social o familiar, todos nosotros tenemos constante necesidad de relacionarnos con otras personas. Unas relaciones que a veces se convierten en una tortura: cuando sentimos que manipulan nuestra voluntad para plegarla a sus proyectos... y, aun sabiéndolo, somos incapaces de negarnos. A partir de técnicas conductistas, Cuando digo no, me siento culpable ofrece un método fácil y de excelentes resultados para afirmar los propios derechos y aspiraciones sin necesidad de manipular los ajenos, y sin tener las frustrantes reacciones defensivas que, a veces con incomodidad, experimentamos.
¿Te imaginas tener al lado a alguien que te menospreciara cada día, que señalara cada uno de tus defectos, que te desanimara en todos tus proyectos y sueños? ¿Te imaginas que no pudieras deshacerte de esa persona nunca, por mucho que huyeras de ella o la intentaras evitar? Es exactamente lo que pasa cuando esa persona tóxica es tu propia mente, eres tú.
Este libro parte de una realidad muy común: a veces somos nuestros peores enemigos. Los pensamientos negativos recurrentes son algo con lo que todos convivimos en mayor o menor medida y estas páginas, a través de un método creado por el propio autor, el método VEGA, nos enseñan a sobrevivir a los autonaufragios que nos provoca nuestra voz crítica, nos dan las claves para dominar esa voz y para convertirnos así en nuestros mejores aliados a través de ejercicios, reflexiones y ejemplos que, poco a poco, irán modelando nuestro modo de manejar nuestro discurso interno.
¿Alguna vez te has sentido sola en compañía de tu familia? ¿Crees que eres mala hija porque necesitas distanciarte de ellos? ¿Cambias cuando estás en su compañía y vuelves a ser esa niña que buscaba su aprobación? Si te resuenan algunas de estas preguntas, este libro es para ti. Bienvenida.
En Cuenta contigo Patricia Ramírez nos propone empezar a trabajar desde el propio interior para lograr nuestros propósitos. Si para empezar a hacer ejercicio necesitamos la compañía de un amigo, si para ser titular en nuestro equipo solo dependemos de la decisión del entrenador, o si para mejorar nuestro inglés esperamos que sea la empresa la que se encargue de nuestra formación, tal vez nunca logremos nuestros propósitos. ¿Por qué? Porque en estos tres casos, parece que el éxito dependerá de lo que los demás hagan por nosotros. Y esto es cómodo, pero poco eficaz.
Los cuentos que encontraréis en estas páginas están especialmente pensados para que los padres puedan explicar a los niños, de manera sencilla y con un leguaje adecuado, el proceso por el cual están pasando y trasmitirles que, aunque sus padres ya no estarán juntos, el amor y el cariño que les tienen siempre permanecerá intacto.
A través de las situaciones que estos relatos nos presentan podremos encontrar el espacio para que los niños puedan reflexionar sobre sus emociones y de esta manera gestionarlas desde el respeto y la empatía.
No se puede disfrutar del presente,
sin hacer las paces con el pasado.
Cuando sufrimos una herida es muy fácil creer que no hay solución, que el dolor nunca se irá y que, desde ese momento, ya nada tiene sentido. También es fácil pensar que el tiempo todo lo cura, que solo hay que esperar y el dolor se irá solo. Pero lo cierto es que nada es tan fácil ni tan difícil. Para sanar esas heridas que se esconden debajo de la piel, hace falta saber olvidar y perdonar, quererse a uno mismo y aprender a vivir en paz.
El tiempo todo lo cura, pero las cicatrices dependerán de lo que hagas durante ese tiempo. Por eso te pido que me acompañes en este viaje, serán solo tres paradas.