La historia de Anna Karénina, junto a la de Madame Bovary, es la del adulterio más célebre de la literatura. El enamoramiento de la protagonista, casada con el alto funcionario Karénin, por el atractivo militar Vronski y el estrepitoso romance que con él vive son el eje de una novela que es mucho más que la pulida tragedia de una caída en desgracia: es un esmerado y delicado retrato de todo un tiempo y un lugar, la vivisección de una sociedad en la que la felicidad de algunos convive con la desdicha de otros.
Los poetas líricos griegos poseen una importancia singular: son los primeros autores de Occidente que deciden escribir sobre las cosas que todavía hoy nos conmueven y apasionan.
La naturaleza, la amistad, la guerra y el deseo son algunos de los temas que llenan estas páginas, en las que voces individuales de toda la Grecia arcaica se alzan para componer una hermosa pieza coral que incita a a vivir en plenitud.
"Las rosas de Pieria" es un nombre metafórico otorgado a las Musas, diosas de la creación.
Bajo su tutela compusieron los líricos griegos arcaicos, cada uno de los cuales tuvo, por supuesto, su propia personalidad y sus particularidades pero compartiendo todos ellos un tono común, además del tiempo (entre los siglos VII-VI a.
de C., aproximadamente) y el espacio (la Grecia continental y la insular) donde les tocó vivir.
Ramón Martínez es un abogado de éxito, un ateo convencido y un padre de familia como otro cualquiera. Pero todo cambia el día que Ramón tiene que ser operado y pierde la lengua ―y con ella la capacidad de hablar― y comienza para él una silenciosa tragicomedia. Carmela, la mujer de Ramón, comenzará a tener discusiones diarias con un marido que no puede contestarle; Paulina y Mateo, sus hijos adolescentes, tendrán que afrontar la nueva situación mientras lidian con sus propias obsesiones (la obesidad y el onanismo). Elodia, la asistenta supersticiosa, busca una cura milagrosa para su jefe, que acude a terapia con Teresa, una psicoanalista, que cultiva marihuana en su ático. En medio de todo este barullo, Benito es el nuevo miembro de la familia: un loro de una especie en peligro de extinción con el que, paradójicamente, Ramón se comunica mejor que con sus seres queridos y que es capaz de blasfemar y gritar todo lo que Ramón no puede.
La casa de caramelo, que culmina el ambicioso proyecto narrativo de Jennifer Egan iniciado con El tiempo es un canalla (Premio Pulitzer en 2011), cuenta la historia de Bix Bouton, un brillante empresario informático en horas bajas que acaba patentando una exitosa herramienta tecnológica que permite acceder a nuestros recuerdos y compartirlos, y que ha seducido a miles de personas. Con una asombrosa variedad de recursos narrativos, Egan pone el foco en el mundo digital y de las redes sociales y nos cuenta la historia de diversos personajes que buscan una conexión real en un mundo cada vez más digitalizado e hiperconectado.
En Leopardo Negro, Lobo rojo, Sogolon, la Bruja Luna, demostró ser un personaje secundario fascinante: una hechicera de 177 años con sus propios intereses, que supo encandilar al público lector y que fue un digno adversario para el Rastreador durante la búsqueda del misterioso niño desparecido. En Bruja Luna, Rey Araña, ha llegado su turno: Sogolon adquiere el protagonismo y ofrece su propia versión de lo ocurrido, su propio relato de lo que le sucedió al niño, de cómo planeó y luchó, triunfó y fracasó en esa búsqueda. Pero esta novela es también la historia de una enemistad de un siglo entre Sogolon y Aesi, el canciller del rey, un personaje oscuro, letal y poderoso, a quien no es fácil desafiar. Sogolon lo hace por sus propios motivos.
En un giro narrativo brillante, Bruja Luna, Rey Araña muestra la historia contada en Leopardo Negro, Lobo Rojo desde la perspectiva de esta mujer indomable que no se inclina ante ningún hombre, mientras ahonda en la lucha que se desarrolla en el interior del imperio.