Pocas obras producen tan plena sensación de encontrarse ante lo que, en los aledaños de lo absoluto, puede llegar a ser la verdadera literatura. Del análisis de la sexualidad y el deseo a la trágica aceptación del destino, de la formación del carácter individual a la conciencia, Faulkner ofrece un relato a tres voces que afecta a por igual a las peripecias de la trama y a esos rasgos de estilo identificadores de actitudes y personajes que constituyen uno de sus mayores logros. El autor sigue el desarrollo de la historia de los Snopes a través de V.K. Ratliff, vendedor de máquinas de coser aparecido ya en Sartoris y Mientras agonizo; su amigo Gavin, en buena medida contrapunto del buen juicio del anterior, y Charles Mallison, encarnación de la esperanza en las virtudes de un nuevo Sur.
En esta Edición Conmemorativa del Cincuentenario, una vez más, el texto ha sido revisado completamente por el autor, Mario Vargas Llosa que ha considerado las nuevas normas dictadas por la Real Academia Española y la Asociación de Academias, además de eliminar las erratas perpetuadas en otras ediciones.
Completan el volumen una «Bibliografía» de referencia preparada por Miguel Ángel Rodríguez Rea y un «Glosario» de voces utilizadas en la novela acompañado de un «índice onomástico» para ayudar a su lectura, que han preparado conjuntamente Agustín Panizo y Carlos Domínguez.
La Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española quieren agradecer a todos ellos su participación en esta conmemoración del cincuentenario de La Ciudad y los Perros, a la que invitan a todos los hispanohablantes.
La banalización de las artes y la literatura, el triunfo del periodismo amarillista y la frivolidad de la política son síntomas de un mal mayor que aqueja a la sociedad contemporánea: la idea temeraria de convertir en bien supremo nuestra natural propensión a divertirnos. En el pasado, la cultura fue una especie de conciencia que impedía dar la espalda a la realidad. Ahora, actúa como mecanismo de distracción y entretenimiento. La figura del intelectual, que estructuró todo el siglo XX, hoy ha desaparecido del debate público. Aunque algunos firmen manifiestos o participen en polémicas, lo cierto es que su repercusión en la sociedad es mínima. Conscientes de esta situación, muchos han optado por el discreto silencio. Como buen espíritu incómodo, Vargas Llosa nos entrega una durísima radiografía de nuestro tiempo y nuestra cultura.