El regreso a la naturaleza y su preservación no es una obsesión ni una necesidad actual, sino que corre en paralelo a la historia de la humanidad y cobra especial fuerza durante el ilustrado Siglo de las Luces y su sucesor, el industrializado siglo XIX, que verá crecer de modo exponencial la población y la tecnología, con la consecuente explotación exhaustiva de materias primas que agota la tierra. Hoy seguimos sufriendo los males que todo esto acarrea, y no parece que haya voluntad de aplicar la medicina que nos sane.
Esta antología, cuyos relatos fueron publicados entre 1830 y 1903, no se ocupa de la naturaleza arcádica de los grecolatinos, ni del jardín del edén de los escritores medievales y renacentistas, ni del paisajismo Barroco, sino de la naturaleza que nos atraviesa como «las corrientes del Ser Universal». Se ocupa, pues, del movimiento que promovieron los transcendentalistas, y del contagio de sus ideas en contemporáneos y sucesores; un contagio que dará lugar a un nuevo género e incluso a una novedosa manera de contar, propio de la literatura estadounidense, que llega hasta nuestros días.
En el París de los años veinte, en un ambiente que fluctúa entre la aristocracia, la bohemia y el mundo del circo, se encarna el enigma esencial de la condición humana en la figura de la joven Robin Vote, fascinada por la atracción del abismo, y en las tres personas que se disputan su amor: el falso barón judío vienés Felix Volkbein, la leal Nora Flood y la ávida Jenny Petherbridge. Testigo de la historia, y confidente de Felix y Nora, el extravagante doctor Matthew O?Connor.
El bosque de la noche, obra maestra de Djuna Barnes y una de las grandes novelas de la literatura del pasado siglo, sigue provocando hoy la misma admiración que generó tras su publicación. Calificada por TS Eliot como «el genio más grande de su época», Barnes trascendió cualquier etiqueta, imbuida del mismo espíritu transgresor que iluminó toda su producción literaria. Esta nueva edición, con prólogo de Siri Hustvedt, vuelve a poner en valor una novela que la autora norteamericana bellamente define como «un canto a la gente que el mundo deshecha: los desheredados, los descarriados, los herejes y los rebeldes».
Esta vez Alexander y Nadia acompañan a Kate al corazón de África.
África Ecuatorial. Hasta allí se han trasladado Nadia, Alexander y su abuela Kate para disfrutar del primer safari en elefante. Kenia es una fiesta de color: bella y sensual, una mezcla de sabores, olores y sonidos inunda cada rincón de esta tierra. Sin embargo, este paraíso también esconde sus sombras. Y la primera señal llegará con las enigmáticas palabras de una sacerdotisa vudú: les espera una durísima prueba, la que les enfrentará al temible monstruo de tres cabezas.
Isabel Allende, una de las voces más representativas de la literatura contemporánea, pone con esta novela un broche de oro a la trilogía «Memorias del Águila y el Jaguar», que inició conLa Ciudad de las Bestias yEl Reino del Dragón de Oro. A través de los ojos de Nadia y Alexander hemos descubierto que el hombre puede ser codicioso, corrupto, malvado y siniestro, pero también hemos conocido a almas que saben escuchar con el corazón, que entienden que el respeto y la solidaridad son la única forma de caminar y que apuestan por un mundo definitivamente mejor.