Vox Machina enjoy a week in Westruun’s lap of luxury leading up to the Winter’s Crest Festival. But that costs coin, which has a bad habit of running out, so they join an underground fighting ring and bash their way to cash. Unfortunately, their ring-fighting turns out to be just a warm-up for a cold reality when a mysterious attack on Winter’s Crest festivities leaves the whole town magically frozen—including one of their own. Vox Machina will have to save the day again, against a much bigger foe than they first realized!
Veth Brenatto doesn’t have an exciting life, but she likes it that way. Unlike her childhood, it’s safe. Predictable. And her husband and son love her almost as fiercely as she loves them. But Veth’s cozy existence is turned on its head when she and her family are captured by raiders. In order to save them, Veth will commit an atrocity that will sever her from all that she loves––maybe forever––and lead her to become Nott the Brave of the Mighty Nein.
The unlikely heroes of Vox Machina are back in action!
Join familiar faces from Critical Role's smash-hit first campaign as their escapades in Stilben lead them toward new adventure--and a dire threat to Grog when he goes missing in the night. Tracking him down will see the party lose one member, gain another, and reveal parts of Grog's secret past. But first, his friends have to actually find him.
«El día en que lo iban a matar, Santiago Nasar se levantó a las 5.30 de la mañana para esperar el buque en que llegaba el obispo».
Acaso sea Crónica de una muerte anunciada la obra más «realista» de Gabriel García Márquez, pues se basa en un hecho histórico acontecido en la tierra natal del escritor. Cuando empieza la novela, ya se sabe que los hermanos Vicario van a matar a Santiago Nasar -de hecho, ya le han matado- para vengar el honor ultrajado de su hermana Ángela, pero el relato termina precisamente en el momento en que Santiago Nasar muere.
El tiempo cíclico, tan utilizado por García Márquez en sus obras, reaparece aquí minuciosamente descompuesto en cada uno de sus momentos, reconstruido prolija y exactamente por el narrador, que va dando cuenta de lo que sucedió mucho tiempo atrás, que avanza y retrocede en su relato y hasta llega mucho tiempo después para contar el destino de los supervivientes. La acción es, a un tiempo, colectiva y personal, clara y ambigua, y atrapa al lector desde un principio, aunque este conozca el desenlace de la trama. La dialéctica entre mito y realidad se ve potenciada aquí, una vez más, por una prosa tan cargada de fascinación que la eleva hasta las fronteras de la leyenda.
Acaso sea Crónica de una muerte anunciada la obra más «realista» de Gabriel García Márquez, pues se basa en un hecho histórico acontecido en la tierra natal del escritor. Cuando empieza la novela, ya se sabe que los hermanos Vicario van a matar a Santiago Nasar -de hecho, ya le han matado- para vengar el honor ultrajado de su hermana Ángela, pero el relato termina precisamente en el momento en que Santiago Nasar muere.
El tiempo cíclico, tan utilizado por García Márquez en sus obras, reaparece aquí minuciosamente descompuesto en cada uno de sus momentos, reconstruido prolija y exactamente por el narrador, que va dando cuenta de lo que sucedió mucho tiempo atrás, que avanza y retrocede en su relato y hasta llega mucho tiempo después para contar el destino de los supervivientes. La acción es, a un tiempo, colectiva y personal, clara y ambigua, y atrapa al lector desde un principio, aunque este conozca el desenlace de la trama. La dialéctica entre mito y realidad se ve potenciada aquí, una vez más, por una prosa tan cargada de fascinación que la eleva hasta las fronteras de la leyenda.
Acaso sea Crónica de una muerte anunciada la obra más «realista» de Gabriel García Márquez, pues se basa en un hecho histórico acontecido en la tierra natal del escritor. Cuando empieza la novela, ya se sabe que los hermanos Vicario van a matar a Santiago Nasar -de hecho, ya le han matado- para vengar el honor ultrajado de su hermana Ángela, pero el relato termina precisamente en el momento en que Santiago Nasar muere.
El tiempo cíclico, tan utilizado por García Márquez en sus obras, reaparece aquí minuciosamente descompuesto en cada uno de sus momentos, reconstruido prolija y exactamente por el narrador, que va dando cuenta de lo que sucedió mucho tiempo atrás, que avanza y retrocede en su relato y hasta llega mucho tiempo después para contar el destino de los supervivientes. La acción es, a un tiempo, colectiva y personal, clara y ambigua, y atrapa al lector desde un principio, aunque este conozca el desenlace de la trama. La dialéctica entre mito y realidad se ve potenciada aquí, una vez más, por una prosa tan cargada de fascinación que la eleva hasta las fronteras de la leyenda.
Rosa Montero retrata con audacia la historia de Ana, quien deberá cumplir con las exigencias de su trabajo como redactora en una revista, cuidar de su hijo y navegar por la noctámbula vida del convulso Madrid de finales de los setenta.
Crónica del desamor es la primera novela de la autora y una obra clave para entender las inquietudes de una generación que se sentía a la vez poderosa y desorientada, y que aún no sabía jugar a manejar su libertad sin herirse.
Nana no es un gato cualquiera. Tiene el pelaje blanco, una cola de color negro con un gancho en forma de siete, las uñas afiladas y la mirada atenta. Le gustan los filetes de carne de cerdo empanados, el pollo y el salmón. Pero aún hay más: entiende el lenguaje de los humanos y tiene opiniones muy suyas sobre la vida. Nació en la calle y durmió en el capó de una furgoneta hasta que un día un hombre se le acercó sonriendo, y desde entonces son inseparables. Satoru y Nana han convivido durante cinco años, pero ahora ha llegado el momento de separarse y de encontrar un nuevo dueño. Juntos emprenderán un viaje en el que Nana verá por primera vez el mar y los campos sembrados de hierba alta, vivirá las emociones más hondas de los humanos y el dolor de la pérdida, y conquistará el corazón de los lectores gracias a la narración llena de ternura y humor de Hiro Arikawa.
It’s 1971. Trash piles up on the streets, crime is at an all-time high, the city is careening towards bankruptcy, and a shooting war has broken out between the NYPD and the Black Liberation Army. Amidst this collective nervous breakdown furniture store owner and ex-fence Ray Carney tries to keep his head down and his business thriving. His days moving stolen goods around the city are over. It’s strictly the straight-and-narrow for him until he needs Jackson 5 tickets for his daughter May and he decides to hit up his old police contact Munson, fixer extraordinaire. But Munson has his own favors to ask of Carney and staying out of the game gets a lot more complicated and deadly.