Un juego entre amantes. Una obsesión. Un tipo de amor que lleva a la muerte. Un thriller distinto, una perturbadora vuelta de tuerca al suspense psicológico. Él dice que es amor. Para ella es obsesión. Mike y Verity llevaban nueve años juntos. Su relación era especial y les encantaba llevarla al límite con un juego muy personal, irresistible. Una prueba de amor y deseo eternos. Por eso, cuando Mike recibe la invitación a la boda de Verity sabe que lo único que ella quiere es que juegue, y él jugará hasta el final.
La carrera profesional de Florence Lovelady llegó a lo más alto cuando treinta años atrás ella misma dirigió el arresto de Larry Grassbrook, un fabricante de ataúdes y asesino en serie. Como algo propio de nuestras peores pesadillas, las víctimas eran niños y fueron enterrados vivos. Florence resolvió el misterio y encerró a Larry en la cárcel el resto de su vida, justo antes de que más niños fueran asesinados.
Treinta años más tarde, Larry ha muerto y los hechos del pasado vuelven a repetirse. ¿Estuvo Florence equivocada durante todos estos años? ¿O hay algo mucho más oscuro y macabro?
«Nunca antes el dicho de «el que no arriesga, no gana» había tenido tanto sentido. María y Tomás son los protagonistas de una historia principalmente de amor donde el riesgo les hizo ganar.» María Pombo
María y Tomás han conectado a la primera. Pueden pasar horas y horas hablando sobre sueños o cómo cambiar el mundo. Cuando están juntos la magia flota en el aire, aunque ellos sean los últimos en enterarse. Pero ni la vida es un camino de rosas ni este libro es un cuento de hadas. Ellos lo descubrirán enseguida. Como también descubrirán el dolor, el temor, la amistad y, sobre todo, el amor.
Esta es una historia de decisiones difíciles, de hacerse mayor de golpe, de realidades que nunca se soñaron y de ilusiones que se cumplen a base de tesón. Pero también es una historia sobre el valor de tomar las riendas de tu propia vida.
Botas de colores para días de lluvia te invita a disfrutar del sol tras la tormenta.