Una conmovedora historia de amistad y supervivencia entre dos mujeres afganas de orígenes muy dispares.
Superando con creces el rotundo éxito de Cometas en el cielo, la segunda novela de Khaled Hosseini saltó de inmediato al primer puesto en todos los países donde se ha publicado. Nueva demostración del asombroso instinto narrativo del autor, el libro cuenta la historia de amistad entre dos mujeres cuyos destinos se entrelazan por obra del azar y de las convulsiones que ha sufrido Afganistán en los últimos treinta años.
Hija ilegítima de un rico hombre de negocios, Mariam se cría con su madre en una modesta vivienda a las afueras de Herat. A los quince años, su vida cambia drásticamente cuando su padre la envía a Kabul a casarse con Rashid, un hosco zapatero treinta años mayor que ella. Casi dos décadas más tarde, Rashid encuentra en las calles de Kabul a Laila, una joven de quince años sin hogar. Cuando el zapatero le ofrece cobijo en su casa, que deberá compartir con Mariam, entre las dos mujeres se inicia una relación que acabará siendo tan profunda como la de dos hermanas, tan fuerte como la de madre e hija.
A VECES QUIEN MÁS TE QUIERE ES QUIEN MÁS DAÑO TE HACE.
Lily no siempre lo ha tenido fácil, pero eso nunca le ha impedido luchar por la vida que quiere y ha recorrido un largo camino para llegar donde está ahora. Su vida comienza a cambiar el día que Ryle Kincaid, un extraordinario neurocirujano, se fija en ella. Ryle es asertivo, terco, tal vez incluso un poco arrogante, pero también es sensible, tremendamente atractivo, brillante, y tiene una debilidad total por ella. Todo en él es perfecto salvo su completa aversión a las relaciones, así que cuando Lily se da cuenta de que ella es la excepción a su regla de «no tener citas», no puede evitar preguntarse por qué ha tomado esa decisión.
Lily y su exmarido, Ryle, acaban de pactar la custodia compartida de su hija cuando Lily se encuentra de nuevo con su primer amor, Atlas. Después de casi dos años sin verse, está entusiasmada porque, por una vez, el tiempo está de su lado, e inmediatamente dice que sí cuando Atlas le pide una cita.
Pero su alegría se desvanece cuando piensa que, aunque ya no estén casados, Ryle sigue teniendo un papel en la familia, y no consentirá que Atlas Corrigan esté presente en su vida y en la de su hija.
Maravillosa, desgarradora e inolvidable, Volver a empezar alterna las perspectivas de Lily y Atlas, y continúa justo donde nos dejó Romper el círculo. Descubriremos más sobre el pasado de Atlas y seguiremos a Lily en busca de una segunda oportunidad de encontrar el amor verdadero mientras tiene que lidiar con un exmarido celoso.
Nadie que conozca la película basada en esta novela podrá olvidar la voz en off que recita la frase inicial de la obra más lograda de Daphne du Maurier: Rebeca. Así comienzan los recuerdos de la segunda señora De Winter, que la transportan de nuevo a la aislada y gris mansión situada en la húmeda y ventosa costa de Cornualles. Con un marido al que apenas conoce, la joven esposa llega a este inmenso predio para ser inexorablemente ahogada por la fantasmal presencia de la primera señora De Winter, la hermosa Rebeca, muerta pero nunca olvidada. Su habitación permanece intacta, sus vestidos listos para ser lucidos y su sirvienta, la siniestra señora Danvers, aún le profesa una devoción malsana.
Y con el espeluznante presentimiento de que algo maligno le está aprisionando el corazón, la joven comienza a investigar el verdadero destino de Rebeca: el oscuro secreto de Manderley.
El decimotercer cumpleaños de Fallon Swift se acerca y su auténtica naturaleza, la de la Elegida, ya no puede permanecer oculta durante más tiempo. Ha llegado el momento de que abandone a su familia y la remota granja en la que se ha criado. Tiene un destino que cumplir.
Su entrenamiento está a punto de comenzar bajo la tutela de Mallick, que ha perfeccionado sus habilidades durante siglos. Fallon aprenderá a curar, a estudiar y a pelear hasta descubrir en sí misma un poder que jamás podría haber imaginado que tendría.
El mundo no renacerá de sus cenizas, ni volverá a ser el mismo, hasta que se convierta en la mujer que está destinada a ser.
A los veintidós años, Elizabeth Gilbert hacía todo lo que podía para evitar un trabajo a jornada completa. Trabajaba en ranchos en Wyoming, montaba a caballo como si fuera una vaquera y se enamoró de los cowboys que constituían el último vestigio de la frontera estadounidense que ella echaba tanto de menos. Y entonces conoció a Eustace Conway.
Eustace Conway no se parecía a ningún otro hombre. En 1977, con diecisiete años, abandonó su hogar para trasladarse a los montes Apalaches. Durante más de dos décadas vivió allí, haciendo fuego con palos, vistiendo pieles de animales y construyendo, cultivando y cazando todo lo que necesitaba para subsistir.
Elizabeth Gilbert, deslumbrada por sus relatos y aventuras, se decidió a reconstruir su vida: la historia del hombre que recorrió el Mississippi en una canoa de madera hecha a mano, que caminó los más de tres mil kilómetros del Sendero de los Apalaches, y que cruzó los Alpes alemanes en zapatillas deportivas.