El unicornio representa para la Edad Media, dentro de la obra de su autor, lo que Bomarzo fue para el Renacimiento: una colosal recreación poética que juega con la atmósfera del pasado para ofrecernos una historia de sugestiva belleza, rara y absorbente. La historia y la magia, la minuciosa reconstrucción de ambientes remotísimos y una originalísima fantasía que anima todas y cada una de sus páginas, se conjugan en un relato inolvidable que constituye sin lugar a dudas una de las obras maestras del gran escritor argentino.
«Prométeme que no dejarás que te pisen o te humillen, que siempre pelearás por tu libertad».
El anciano David Davis dirige, con mano de hierro, el mayor grupo de comunicación de nuestro tiempo con televisiones, periódicos, productoras cinematográficas y otros medios, capaces de influir en el voto en los Estados Unidos. Davis sospecha de la existencia de un plan para arrebatarle el poder y no está dispuesto a cederlo.
Jaime, un alto ejecutivo del grupo, siente que ha traicionado los ideales de su juventud a cambio de una aburrida seguridad. Pero todo cambia cuando conoce a Karen, una compañera de trabajo por la que sufre una irresistible atracción y que le introduce en un Grupo filosófico-religioso que cree en reencarnaciones.
En una trepidante sucesión de acontecimientos donde pasado y presente se confunden, Jaime se ve arrastrado a una aventura en la que poder, seducción, amor y muerte se entrecruzan en una conjura en la que el control sectario del Grupo parece ser el último fin.